Info Blanco sobre Negro entrevistó a al director de la Carrera de Ingeniería Forestal, Gustavo Acciaresi, que estuvo monitoreando el estado del histórico árbol. “El alcornoque no tenía nuevos brotes y hay numerosos elementos que evidenciaban su decrepitud. Está muerto”, aseguró el especialista.

“Cuando lo fuimos a ver a fines del año pasado pudimos notar que sus principales ramas estaban podridas y eso implica un serio riesgo porque pueden desprenderse en cualquier momento y sin aviso”, comentó Acciarecci y agregó: “Recomendamos a las autoridades de Periodismo hacer una poda preventiva y cercarlo”.

El alcornoque que tendría casi 150 años de edad es muy preciado por el barrio y la comunidad académica de Periodismo. Días atrás, cuando sus ramas eran cortadas, varios vecinos se acercaron a pedir explicaciones y la medida generó cierto enojo.

“El árbol estaba protegido y era monitoreado por especialistas de Agronomía. Hay un expediente por este tema, no se avanzó en forma imprevista. Los especialistas dijeron que el alcornoque estaba muerto y que implicaba un riesgo por si se caía”, comentaron a este portal desde el área de mantenimiento de la Facultad de Comunicación Social.

A pesar de su valor simbólico, Acciarecci remarcó que el alcornoque no tiene importancia en términos de conservación porque no es una especie nativa. Aunque muchos creen que el de Periodismo era el único árbol de su especie en la región, el ingeniero forestal aseguró que, al menos, hay uno más que está ubicado a un costado del camino interno que une a las distintas unidades académicas de la UNLP radicadas en el Bosque.

El alcornoque es un árbol nativo de Europa y del norte de África. Su característica saliente es su corteza liviana y porosa que crece hasta alcanzar varios centímetros de espesor. De esta se extrae el corcho, que entre otras aplicaciones, desde la época de los romanos se usa para proteger y tapar las botellas de vino.

“Nosotros recomendamos no sacarlo del todo por el valor que tiene para la gente de la Facultad y propusimos hacer una extracción para datearlo y hacer una suerte de línea del tiempo a partir del árbol”, comentó Acciarecci y agregó: “Lo que si planteamos es la necesidad de reforestar el parque con plantas nativas y conformar una suerte de ágora”.