viernes 29 de marzo de 2024 - Edición Nº -1941

Información General | 17 jul 2016

Gualicho

El paleontólogo de la UNLP que halló al "dinosaurio estrella del 2016" cuenta los detalles de la proeza

El doctor en Ciencias Naturales de la Universidad Nacional de La Plata y profesional del CONICET, Sebastian Apesteguía, relató a Gustavo Girodo e Ivana Galva (Radio Estación Sur, 97.7) cómo fue la investigación y descubrimiento del dinosaurio "Gualicho". El relato del investigador devela los detalles del desafío que el grupo supo resolver ante la burocracia y los problemas de logística, y sobre todo, el verdadero significado del hallazgo de este ejemplar que los divulgadores profanos consideraron el "eslabón perdido" entre las aves y los dinosaurios.


Apesteguía lleva sobre sus espaldas más de 50 campañas de investigación en la Argentina, Bolivia, Perú, Ecuador, EE.UU., Francia y Hungría. Por si fuera poco, dio nombre a 25 nuevas especies fósiles de dinosaurios. Tiene 47 años y trabaja para la Universidad Nacional de La Plata.

En un diálogo con la Radio Estación Sur de la capital provincial, Apesteguía detalló los pormenores del descubrimiento de “Gualicho”, explicó por qué se niega a hablar de “eslabón perdido”, y contó anécdotas de cómo la mediocre función de pequeños funcionarios se interpusieron entre los restos del dinosaurio (que fue noticia en todo el mundo) y el equipo de paleontólogos y guías que desarrollaron un duro trabajo en el desierto patagónico.

“No hablamos de eslabones perdidos porque para eso habría que considerar a la evolución de las especies como una cadena. Lo que consideramos hoy en día es a la línea evolutiva como un arbusto ramificado y tridimensional, que es algo muy distinto a la idea de una cadena”, comenzó explicando Apesteguía.

Es que con el hallazgo de “Gualicho” se mencionó el descubrimiento de un supuesto “eslabón” entre los antepasados de las aves actuales y los míticos dinosaurios, espectacularmente popularizados por las películas de Steven Spielberg.

“Lo que sí es cierto, sin dudas, es que Gualicho tiene una relación con el linaje que origina las aves. Eso es correcto, es un terópodo de los más grandes (terópodos eran los dinosaurios carnívoros). Hay dos principales: unos son los teratosaurus y otros son los tetanuros. Dentro de los tetanuros están las aves , y también Gualicho”, explicó Apesteguía.

¿Gualicho es más grande que un velociraptor?

Sí, mucho más grande. Un velociraptor tiene el tamaño de un galgo.

Ah bueno, nos engañó Spielberg

- Claro que nos engañó, los que en el año 1993 – cuando salio la película- ya estábamos en tema (de hecho fuimos todos los muchachos del Museo juntos a verla)…

¿Se rieron?

- Sí, decíamos: ¡si tiene que tener el tamaño de un perrito!

¿Les mandaron algún mail?

- No, es que ellos ya lo sabían , y de hecho tenían una carta bajo la manga , que era que habían encontrado un pariente del velociraptor, que después se le dio nombre: se lo llamó “Utahraptor” porque fue encontrado en Utah. Ese sí tiene el tamaño correcto de la película, pero es otra especie, no el velociraptor,

¿Y Gualicho esta en esta cadena de dinosaurios carnívoros?

- A grandes rasgos sí, pero no está tan cerca de los velociraptores. En realidad los velociraptores se caracterizan por ser parte de un grupo que se llaman maniraptora , porque tienen unas manos enormes, con garras, y es justamente lo que NO pasa con Gualicho.

EL HALLAZGO, LA BUROCRACIA Y LA ESTUPIDEZ HUMANA

¿Por qué le pusieron “Gualicho”?

- Fue terrible el hallazgo de este dinosaurio. Ocurrió en febrero de 2007, en un campo del norte de la provincia de Rio Negro, cerca de Neuquén, a 15 km de El Chocón. El lugar es completamente desértico, y uno ve al lago en el horizonte como un lugar al que no puede llegar y se muere de sed. Así que sólo tiene lindo lo paisajístico, y bueno, y en ese lugar encontramos al dinosaurio, el martes 13 de febrero de 2007. Pero de eso me entere hace solo tres semanas , hasta entonces no sabia que había sido un día martes, entonces no tiene nada que ver con el nombre. Había sido puesto un año antes, o más.

UN IMPREVISTO

“Había sido muy difícil entrar al campo para que nos dejaran trabajar , porque el dueño de la propiedad era un tipo muy duro, muy difícil de convencer . Por mas que reconocía que los fósiles son del Estado, decía “Pero acá no me levantan nada”, Y a los dos días de encontrar el espécimen, uno de los dos vehículos que teníamos para el trabajo de campo volcó en un camino de ripio (por suerte no se lastimó seriamente nadie) pero tuvimos que suspender la campaña porque con un solo vehículo apenas si lográbamos levantar el campamento. Entonces dimos por terminada la campaña, al dinosaurio lo tapamos con yeso y con rocas para que aguantara hasta el año siguiente, en el que íbamos a ir a buscarlo”, relató el paleontólogo de la UNLP.

OTRO EQUIPO SE LLEVÓ NUESTRO DINOSAURIO

Continúa el relato: "En el ínterin cambiaron las autoridades de Cultura de la Provincia de Río Negro , o sea las nuevas no nos dejaron entrar. Nos dijeron que no, que no nos renovaban los permisos, y la verdad es que el dinosaurio era lo último que nos preocupaba porque también teníamos un montón de proyectos de trabajo . Y estuvimos peleando para que nos dejasen entrar, y dos años después nos enteramos de que le habían dado permiso a otro equipo , y ese otro equipo fue y se llevó nuestro dinosaurio. Así que de vuelta a pelear , y no pudimos hacer nada, nuestros reclamos fueron desoídos hasta que de vuelta cambiaron las autoridades de la provincia, que eran mas razonables que las anteriores. Ahí se reconoció que a los restos los habíamos encontrado nosotros y recobrarnos la prioridad para su estudio.

¿Cuando encontraron al dinosaurio notaron algo importante en el linaje?

- No para nada , eso lo supimos después de la preparación del espécimen, que llevo bastante tiempo también.

UN FINAL FELIZ

“Alcanzaba los seis metros de longitud y vivió hace 90 millones de años. Fue hallado en Río Negro, justo frente a la localidad neuquina de Villa El Chocón. No tenía un cuerpo muy robusto, por lo que los investigadores estiman que difícilmente atacara a especies que lo superasen en tamaño” consignó inmediatamente a la difusión del descubrimiento el diario Crónica..

Y dio detalles de la presentación: “La nueva especie se dio a conocer en el Centro Cultural de la Ciencia, con la presencia del ministro Lino Barañao, el presidente del CONICET Alejandro Ceccatto y el presidente de la Fundación de Historia Natural Félix de Azara Adrián Giacchino, quienes acompañaron a Sebastián Apesteguía y al licenciado Rubén Juárez Valieri, que se especializa en dinosaurios carnívoros y ornitisquios en la Secretaría de Cultura de Río Negro.”

Al cierre de la entrevista, Apesteguía valoró el trabajo de los paleontólogos argentinos e hizo un breve balance del desarrollo de esa disciplina en este país: “Por suerte en 2020 se van a cumplir 200 años de la primera publicación científica de un fósil argentino hecha por argentinos. Estamos ante dos siglos de tradición paleontológica, no solo de hallazgos, de una disciplina continuada en el tiempo”.

Carla García Prado

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