Toda historia es historia presente, afirmó Benedetto Croce, al asumir que las múltiples búsquedas de hitos del pasado y su interpretación, apuntan a desentrañar problemas actuales. En unos días comenzará la identificación de los 123 soldados argentinos enterrados como N.N. en Cementerio Darwin, Islas Malvinas.

La restitución de identidad a aquellos jóvenes a quienes el Estado terrorista truncó su destino y sus sueños, tiene que ver con las constantes relecturas de ese pasado en presente que propone el Centro de Ex Combatientes Islas Malvinas La Plata. En dicho punto, las diversas acciones desplegadas por el Organismo deben motivar una profunda reflexión respecto a la importancia de desplegar las estrategias en los diversos planos que componen la trama socio/cultural.

En paralelo, el CECIM ha logrado impugnar las pensiones honoríficas de ANSES a personas involucradas en delitos de lesa humanidad durante la última dictadura cívico-militar. A ello debe añadirse la causa que promueve el Centro en la que se investiga la presunta responsabilidad por comisión de crímenes de lesa humanidad, consistentes en torturas y otros tratos crueles e inhumanos, de miembros de las Fuerzas Armadas argentinas en perjuicio de los soldados conscriptos.

Asimismo, el CECIM ha logrado dar impulso a un expediente que tramita ante la Justicia Federal de Río Grande, Tierra del Fuego, en la que se investiga la presunta comisión de crímenes de guerra por parte de miembros de las Fuerzas Armadas británicas en detrimento de soldados argentinos.

En línea con lo esbozado, en el último año se ha interpuesto una denuncia penal contra la ex Ministra de Relaciones Exteriores y Culto de la Nación, Susana Malcorra, por la presunta comisión del delito de incumplimiento de los deberes de funcionario público; y una acción de amparo ante el Fuero de la Seguridad Social, exigiendo el restablecimiento del Programa de Atención a Veteranos de Guerra de PAMI, suspendido desde diciembre de 2015.

Como puede apreciarse, son múltiples las tácticas por las que se debate la caracterización de la guerra de Malvinas. La descolonización y lucha contra el imperialismo son vectores transversales que integran los reclamos concretos de Justicia, la promoción de la Memoria y la debida delimitación de la Verdad. La Soberanía se disputa, también, en el plano de la historia.

No es sencillo el desafío. Por el contrario, encontramos resistencias incluso, entre sectores con quienes compartimos espacios similares, o caminamos por sendas análogas. Sin embargo, el apego a la ética, a la perseverancia y coherencia ha hecho del Centro de Ex Combatientes Islas Malvinas La Plata, un espacio de referencia indiscutida en el plano local e internacional.

Hace unas semanas nos reunimos con la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, y pudimos intercambiar nuestro parecer respecto al hilo conductor que une todos los puntos expuestos. Fue importante en múltiples aspectos. Sobre todo, en la asunción de que la historia la ganan quienes la escriben. Para ello, o frente a ello, es indispensable señalar que el motor de nuestra historia se encuentra cristalizado en calle 19 y 51 de la ciudad de La Plata, en donde aquellas tres columnas erigidas en homenaje a las FFAA, se han resignificado, y ahora constituyen los pilares de todas nuestras batallas: Memoria, Justicia y Soberanía. Sólo en su consagración, o a partir de ella, podremos alcanzar la Verdad, a la que le faltarán mosaicos hasta tanto no encarcelemos a los perpetradores del horror.