Es la primera vez que esta negación de las acciones cometidas por el Estado, acciones que tienen como trágica consecuencia la ausencia de una persona, es negada por un gobierno democrático. ¿Una aberración? Sí, es claramente una aberración, una incongruencia, que atenta de lleno contra la vida de la democracia, fuerzas del estado cometiendo el peor de los delitos, negando todos los derechos, deteniendo, secuestrando, desapareciendo, encubriendo, negando, acusando he investigado a la víctima, a familiares y amigos, prohibiendo que se hable del hecho.

Nuevamente, otra vez, la negación de un sector de la sociedad acompañando, respaldando al opresor, repitiendo el “algo habrá hecho”, “era de las FARC”, “ataco un puesto”, “los RAM son terroristas” otra vez se lo llevaron y no hay que decirlo, que no se hable en las escuelas, que no se hable en la radio, que no se hable y si se habla será para ocultar la verdad, “lo mato un puestero” “no estaba el día del operativo”, “se fue con un camionero”,” está en Entre Ríos”, no está, es un desaparecido, igual que en la noche más oscura.

Nuevamente, otra vez escribir sobre el terror, otra vez el terrorismo de estado. Intentaran inventar alguna historia, alguna mentira para salir y seguir negando y mintiendo, como en todo lo que hacen, a cara descubierta, impunes.

Nuevamente, otra vez a contar los días desde que se lo llevaron, a contar los meses que no lo tenemos, ahora sin Santiago, un mes en donde lo conocimos desde su ausencia, a través de su hermano, ahora lo queremos vivo, porque no soportamos mas ausencias impuestas y forzadas…la fuerza de la democracia no debe ser para imponer desaparición.

No lo toleramos estamos esperando respuesta para que esto no sea el fin del respeto democrático y el estado de derecho.

Siempre mi viejo está en mi pensamiento y tiene muchos nombres, Elsa, Raul, Pocho, Mariana, y miles de nombres mas, mi viejo se llama Enrique Nestor, se llama Santiago Maldonado.

Marcelo Ardeti
Referente Ag. Hijos del 55
Hijo de Enrique Nestor Ardeti, desaparecido en 1979