Según sus autores, “La obra de teatro simboliza la vida de Ricardo Barreda pero hace un énfasis particular en el rol que ocupó y ocupa la sociedad antes estos hechos, que van desde una admiración peligrosa hasta el odio acérrimo. En ese abanico de sensaciones la sociedad fue moviéndose con respeto al caso Barreda. En esos cimientos es donde la dramaturgia de “Eran ellas o…yo” muestra su carácter más incisivo. Porque establece preguntas y cuestionamientos significativos para una sociedad que odia y ama a sus criminales (en rigor, femicida en este caso) con la misma intensidad. El contacto personal y hablar con Ricardo Barreda fue esencial para armar la dramaturgia de la obra. Para construir un lenguaje cercano a las emociones y sensaciones de un femicida frio y cauteloso a la hora de hablar. La obra establece esos momentos con caracterizaciones precisas y complejas. Como también deja entrever como hay un antes y un después en la sociedad de estos famosos asesinatos”.

SÍNTESIS: Fueron ellas o…yo La obra teatral “fueron ellas o…yo” está basada en la vida del múltiple asesino Ricardo Barreda. Un hombre que tras matar a su mujer, su suegra y sus dos hijas generó en la opinión pública opiniones encontradas. Las escenas dramáticas tienen como pregunta principal, desentrañar el origen de una sociedad que justifica y rechaza los femicidios en iguales proporciones. De esa forma se desarrolla la historia de Ricardo Barreda en el escenario, donde se pone en juego las diferentes dramatizaciones del fatídico hecho ocurrido en 1992. El perfomance resultante es un llamado abierto a pensar que muchas veces un asesino son producto de la sociedad que no está al margen. Y lo aterrador y siniestro es lo mucho que nos parecemos. En la obra teatral “Fueron ellas… o yo” se ve las dolorosas pérdidas humana y el espacio del subconciente de un asesino donde el imaginario colectivo de la sociedad nos hace repensar que rol cumple los medios, las opiniones públicas y la condena social como manifestación visible.

Noviembre de 1992, La Plata. Marca una visagra con respecto a los femicidios en el país. El tranquilo y bien acomodado Ricardo Barreda, odontólogo prestigioso, asesinó sin piedad a toda su familia,todas mujeres. Si vamos a las páginas de los diarios de esa época y a las diferentes crónicas escritas y televisivas, nos encontraremos con una sociedad dividida que debatía y justificaba esta masacre. Mujeres y jóvenes universitarios aplaudiéndolo y graffitiando paredes deciendole “IDOLO”. Bandas musicales conocidas dedicándole canciones.

Luego de años de cárcel y ya en libertad, La Cuarta Pared, Grupo teatral platense, lo entrevista en el hospital que utiliza de de hotel, y comienza este trabajo. No lo armamos tratando de imitarlo, sino que nos interesó su caso y el rol de esta sociedad que se rasga las vestiduras por el NI UNA MENOS.
El está viejo, pero muy lúcido y comprende perfectamente lo que hizo. Incluso parece que está viviendo en La Plata. Volvió como todo asesino a la escena del crimen.

ACTOR HORACIO RAFART
DIRECCION GUILLERMO ALE Y NICOLAS MASSCIOTRO
GRUPO LA CUARTA PARED
TEATRO LAS TABLAS, calle 40 ENTRE 18 Y 19
VIERNES 22 DE SEPTIEMBRE Y DOMINGO 24 DE SETIEMBRE.
AMBOS DIAS A LAS 22 HS