El “terraplanismo” está integrado por personas de todo el mundo que intentan reabrir una pregunta que para la ciencia y la inmensa mayoría de la sociedad está saldada desde hace siglos. A diferencia de la versión científica y del sentido común imperante, este movimiento cree que la superficie terrestre es plana como una moneda, que está rodeada por la Antártida, una suerte de muro gigante de hielo, que el planeta está quieto y que en realidad son el Sol y la Luna, elementos muchos más pequeños y cercanos de lo que se cree, los que se mueven por el cielo de forma focalizada, como una linterna.

En diálogo con Info BLANCO SOBRE NEGRO, Iru Landucci contó: “Yo me dedicó a los efectos audiovisuales y entré en este tema cuando vi las imágenes truchadas de la NASA”. Para el “terraplanismo”, no existen satélites orbitando ni fotos reales que hayan capturado la Tierra desde el espacio.

El platense de 37 años sabe que para la mayoría de las personas esta teoría es ridícula. Sin embargo, no se acobarda y difunde con entusiasmo los cuestionamientos del “terraplanismo” al modelo heliocéntrico. “La historia está plagada de conspiraciones. La teoría de la Tierra esférica es el lavado de cerebro más grande”, asegura.

Los videos de su canal de Youtube “Nur para todos” le valieron reconocimiento en todo los países de habla hispana y se transformó en el referente de esta teoría a nivel Latinoamericano. Fue invitado a programas de radio y televisión, el año pasado viajó a Estados Unidos para participar del primera conferencia internacional de terraplanistas que reunió a más de 400 personas de todo el mundo y en pocos meses disertará en una segunda convención que se hará en Inglaterra.

“Mi canal es el más representantivo de América Latina y por eso me invitan a las conferencias como exponente en habla hispana. Este tema se está expandiendo a nivel mundial, aunque en Argentina todavía parece muy extraño”, comentó.

En el mundo hay dos organizaciones, la “Sociedad de la Tierra Plana”, fundada en el siglo XIX por el matemático Samuel Rowbotham que propuso que la Tierra es un disco chato y que la luna y el Sol estarían a sólo 4.800 kilómetros de la superficie de la Tierra. “Luego la refundó un jesuita pero comenzaron a plantear posturas ridícula como si fuera algo intencionado. La otra es la Sociedad Internacional de la Tierra Plana fundada por Eric Dubay, que retomó y le dio impulso a este movimiento en los últimos años”, explicó el platense.

Para esta sociedad, todo el perímetro de la Tierra plana está rodeada por lo que se conoce por Antártida. “Es el continente más elevado en promedio. Si uno avanza cientos de kilómetros, automáticamente te topas con una pared de 2.500 metros de altura”, aseguró Landucci y agregó: “La Antártida está cercada por tratados internacionales a propósito. Después de ese muro no se sabe que hay porque nadie lo atravesó”.

Tirar un globo para comprobarlo

Iru Landucci y un grupo de teerraplanistas argentinos iniciaron un proyecto colaborativo en la página Ideame que busca reunir 30 mil pesos para financiar el lanzamiento a la estratósfera de un globo de helio equipado con varias cámaras para obtener una visual de 360º de la Tierra, como una prueba más de que la superficie que habitamos es plana.

Una de las metas de esta iniciativa es “evaluar la distancia y la morfología y la curvatura del horizonte a más de 35 kilómetros de altitud”. Se trataría del primer Globo Terraplanista Latinoamericano.

“Ya llevamos juntados 17 mil pesos. Aunque parezca extraño, me sigue mucha gente y al tema del terraplanismo también”, aseguró el platense. El globo será lanzado de modo autogestivo porque no lograron conseguir avales oficiales para hacer este tipo de pruebas. “La organización argentina encargada de tirar este tipo de globos recibió una baja desde Estados Unidos”, contó.

Aunque sería el primer globo aerostático lanzado con esta finalidad en la región, este tipo de experimentos fue realizado decenas de veces en otros puntos del mundo. “El cuestionamiento con respecto al modelo de la Tierra esférica reflotó cuando algunos ingenieros empezaron a tirar estos globos, pero todavía no fue lanzado ninguno en los países de habla hispana”, aseguró el técnico audiovisual.

Y agregó: “Si la Tierra fuera esférica y midiera 12 mil kilómetros de diámetro, a 20 kilómetros se debería ver un índice de curvatura, pero en los globos que han tirado no se ve nada”.

”La NASA es una farsa”

En el modelo terraplanista no existe la gravedad, teoría que remplazan por la “densidad”. En este sistema de pensamiento, los satélites artificiales orbitando alrededor de la Tierra no pueden existir. “La NASA lanza globos por todo el mundo para lograr el rebote de ondas necesario para las telecomunicaciones”, describió Landucci.

“Las fábricas de satélites son un lavadero de guita espectacular, usan 30 kilos de oro para laminarlo. Todas las pruebas se hacen de antena a antena, en Tierra, y después se los envían a Estados Unidos o a China para que hagan el lanzamiento, ahí arranca el show”, aseguró y continuó: “Los cables de fibra óptica se siguen tirando en barco de continente a continente, acá entra por Las Toninas. Dónde está toda la capacidad satelital si seguimos usando la misma estructura y ponen cada vez más antenas terrestres”.

Sobre los viajes al espacio, los terraplanistas creen que son otra gran mentira. “La llegada del hombre a la luna es una vergüenza. No hay fotos satelitales de la Tierra son todas representaciones digitales. No hay un solo video real del Planeta Tierra girando sobre su propio eje”, cuestionó el platense.

Y señaló: “El verdadero sistema con el que se hace Google Earth se llama aero grid, hay una empresa muy grande que todos los días fotografía la Tierra desde aviones con unas cámaras que creó Microsoft. Ellos después proveen el material para poder hacer ese mapeado. Cuando te alejas más, aparece el dibujito de la Tierra”.

Por otra parte, el técnico audiovisual aseguró: “Cuando se ven imágenes de la NASA en vivo son un chiste, se ha visto burbujas de agua que despiden los movimientos de los astronautas porque todo se filma dentro de piletas con agua destilada”.

La teoría conspirativa también alcanza al lanzamiento de cohetes que según Landucci “son un fuego de artificio. A los 30 segundos que despega se ve que el cohete queda en arco y a los 2 minutos pasan a un dibujito. Lo cohetes caen todos al agua, los que lanza la NASA terminan en el Triángulo de las Bermudas”.

“Nos hipnotizaron a todos”

“Los astrónomos saben que nadie demostró en forma fehaciente que la Tierra rota. El heliocentrismo son sistemas de coordenadas, no hay forma de corroborar que giramos alrededor del Sol. Nos hipnotizaron para que creemos que a pesar de ver que se mueve el Sol, en realidad los que nos movemos somos nosotros”, aseguró Landucci y fue un poco más allá: “La Tierra no es un planeta, no se sabe que es en realidad”.

Para los terraplanistas, el efecto de la gravedad en realidad se explica por la densidad que hace que objetos más densos que el ambiente caigan y los más livianos se eleven. Aunque coinciden en el cálculo de la aceleración de 9,8 metros por segundo, cuestionan las explicaciones científicas sobre el comportamiento de las masas de agua. “Nunca nadie demostró que el agua pueda quedarse pegada a una pelota por la gravedad”, aseguró.

Sobre el objetivo de semejante conspiración a nivel mundial, Landucci cree que se trata del “control espiritual”, y afirma que “detrás están los jesuitas que crearon la masonería”.

“El espacio es el principal lavadero de guita, no se comprueba nada del dinero que se gasta. Por qué no se pueden fotografiar satélites a baja órbita desde la Tierra cuando supuestamente hay 14 mil dando vueltas en el espacio”, cuestionó.

Sobre las consecuencias de mantener esta teoría, el platense reconoció: “Traer esta discusión a los asados hace que todos te ataquen, porque la mayoría no está preparada para cuestionar teorías que nos han metido en la cabeza desde que nacemos”.