El gobierno nacional dispuso 10 millones de pesos para el Partido de La Plata, recursos que en parte puso a disposición la Municipalidad junto al Consejo Social de la Universidad Nacional de La Plata, para que entidades distribuyan en barrios de la ciudad.

“No está del todo claro cómo ni con qué criterio Garro dispuso que se le dé a cada institución una parte de esa ayuda alimentaria para que le llegue a las familias más humildes del distrito”, explicó Maia Luna consultada por este portal.

Además, la referente local de Barrios de Pie señaló que las organizaciones sociales están excluidas de ese listados de entidades. “En 12 comedores que sostenemos durante todo el año con mucho esfuerzo solidario la gente nos pregunta cuándo va a llegar la ayuda, y no tenemos respuestas del municipio”.

En teoría, de acuerdo a lo que pudo confirmar Info BLANCO SOBRE NEGRO, un rol importante debería desempeñarlo también la secretaría de Desarrollo Social, que está a cargo de la ex juventud del PRO Julieta Quintero Chasman.

En el Palacio Municipal todos descuentan que la decisión sobre el destino de esa ayuda del gobierno nacional será definido por Fernando Ponce, ex mano derecha de Garro en el Concejo Deliberante.

Allí fue presidente hasta que salió eyectado por una denuncia una ex empleada municipal que detalló en la Justicia cómo el dirigente macrista intentó, según ella, obligarla a que le practicara sexo oral.

Desde fines del año pasado, Ponce circula profusamente por los pasillos de la Municipalidad, y los rumores sobre su retorno comenzaron a hacerse más frecuentes. Es él quien en los hechos dispone de lo que se hace desde la secretaría de Desarrollo Social.

La preocupación de Barrios de Pie también es motivo de alarma entre otras organizaciones sociales de La Plata, que vieron de cerca dos temas clave en relación a la futura distribución de ayuda: el poder que mantiene el ex funcionario denunciado por “coacción contra la libertad y la integridad sexual” sobre Desarrollo Social, y la importancia que tiene Ponce para el sostenimiento de la poderosa red de punteros que el PRO mantiene (y no con charlas recreativas ni ciclos de cine) en muchos barrios platenses.

“Esos muchachos son pesados, están vinculados a las barras bravas de Estudiantes y Gimnasia y se están quedando sin dinero”, advirtió a este medio el referente que comparte el planteo de Barrios de Pie.

Se descuenta que muchos de esos punteros ya se aseguraron su parte en el reparto que coordinará desde las sombras el ex funcionario denunciado, y otros referentes comunitarios que no dependen de Garro ni de Ponce expresaron a viva voz su indignación por haber sido marginados de las tareas de contención ante la crisis.

Si a ello se le suma los bolsones que las entidades tradicionales (Cáritas por ejemplo) obtendrán por peso propio, es entendible que organizaciones como Barrios de Pie reclamen ser integrados a la distribución de alimentos.

Son ellos los que están durante todo el año junto a esas familias, y los punteros que trabajan para el municipio sólo cumplen tareas en cada turno electoral. No es lo mismo sostener una mesa con propaganda partidaria en una campaña partidaria, que en pleno enero trabajar por la prevención del dengue, por ejemplo.

En ese contexto, Barrios de Pie lanzó un comunicado en el que señala: “Desde que se conoció la emergencia sanitaria en el país a raíz de conocerse los primeros casos de la nueva gripe conocida como Covid-19, el Gobierno Municipal de Julio Garro, lejos de abordar el tema con responsabilidad y priorizar a los sectores más vulnerables de la sociedad, prefirió la mezquindad política por sobre el sentido de humanidad que requiere el momento”.

“De eso dan cuenta los barrios del Gran La Plata, donde la ayuda nunca llegó y el panorama es de olvido. Desde que empezó a regir el aislamiento social, preventivo y obligatorio, ahí donde se asientan los sectores más postergados, todos los días se acercan las familias a los comedores y merenderos a preguntar si hay un plato de comida o algo de mercadería”, agregó BdP.

También remarcaron que “las familias viven el día a día y frente a esta situación se quedaron sin sus fuentes laborales en la economía informal y, por ende, se quedaron sin sus ingresos diarios o semanales”.

“Trabajadoras domésticas, cooperativistas, changarines, obreros de la construcción, vendedores ambulantes, adultos mayores que no tiene la jubilación y la lista sigue, son los más afectados y la ayuda de la comuna nunca llegó para ellos”, expresaron desde esa organización.

En el final del comunicado Barrios de Pie aclara: “Garro recientemente anunció la entrega de 25 mil bolsones de mercadería, pero no nos ha participado de nada. Queremos saber cómo lo hará y queremos ser parte de esa distribución para garantizar que la ayuda llegue a quienes lo necesiten y que no se reparta a discreción”.