El gobierno bonaerense avanza con un proyecto que busca dar una solución habitacional a familias que viven en asentamientos precarios de la zona, y a otras que podrán acceder a través de programas de vivienda.

Este “Proyecto Urbanístico Integral” se desarrollará en 160 hectáreas cedidas por el Estado Nacional a través de la Agencia de Administración de Bienes del Estado (AABE). Se trata de tres parcelas grandes comprendidas por las calles 76 y 83 desde 143 a 155, donde antes funcionaba el Club de Planeadores.

Este desarrollo resulta novedoso porque excede la cuestión habitacional e incorpora todas las dimensiones que comprenden el concepto amplio de hábitat.

En diálogo con Info BLANCO SOBRE NEGRO, el subsecretario de Urbanismo y Hábitat de la Provincia de Buenos Aires, Rubén Pascolini, destacó: “El proyecto se inició a partir de sucesivas tomas y se decidió avanzar con una propuesta integral que excede la cuestión de la vivienda”.

Sobre la concreción del proyecto, el funcionario explicó que “se avanzará en forma progresiva por etapas” y reconoció la complejidad de la tarea porque “es un predio con constantes usurpaciones y de difícil control por su extensión”.

Además de viviendas sociales, en el predio se generará suelo urbano para familias de clase media a través programas nacionales o provinciales. En total, en el lugar se proyecta una solución habitacional para 2.400 familias, entre la modalidad de lotes con servicios, dúplex y viviendas de densidad media, multifamiliares”.

El proyecto contempla además la construcción de un centro de salud, un jardín de infantes, una escuela, un parque lineal a lo largo de un curso de agua ya existente, un gran parque forestado y un polo productivo agroecológico de 23 hectáreas que abastecería de alimentos a las familias que se encuentran en los nueve barrios lindantes.

Además, se impulsa el desarrollo de una unidad de producción de bioinsumos y una plantinera que permitan abastecer de insumos agroecológicos a bajo costo, no solo al predio, sino también a los productores de la zona. Ese polo generaría 300 puestos laborales.

“Este es el proyecto más importante para la región en los últimos años. A nivel nacional hubo proyectos de envergadura pero en general se limitan a la cuestión de vivienda. La idea es que este barrio beneficie no solo a quienes reciban un lote o una vivienda sino también a toda la ciudad”, destacó Pascolini.

El plan urbanístico contempla la participación de organizaciones sociales, mutuales, sindicales y empresas que, a partir de la generación de suelo urbano, podrían desarrollar distintas soluciones habitacionales, comerciales y de uso mixto.

“Las personas que participaron de la toma tendrán un lugar si cumplen todos los requisitos. Nosotros pedimos que no avancen con las tomas para evitar la formación de nuevos asentamientos precarios y buscar soluciones verdaderas”, explicó el funcionario.

Y subrayó: “Buscamos convertir un conflicto en un proyecto urbanístico con aportes a diversas comunidades incluidos los de ocupantes que representan a muchas familias muy necesitadas de barrios cercanos al predio. El acuerdo con ellos mes que desocuparán voluntariamente el predio para que se puedan ejecutar las tareas propias de la urbanización, que comenzarán en la primera etapa con el amojonamiento de los terrenos y la apertura de calles”.