Casi terminando un acalorado proceso eleccionario en todas las Facultades, este sábado sesionará la Asamblea Universitaria para elegir al nuevo Presidente de la UNLP. El único candidato a máxima autoridad en la Universidad es Raúl Perdomo, licenciado en Astronomía e investigador del CONICET.

Raúl Perdomo es Vicepresidente del Área Institucional de la UNLP desde junio de 2010. Ocupó la vicepresidencia única en las gestiones desde 2004 hasta el 2010, acompañando durante años las gestiones del arquitecto Gustavo Azpiazu (2004-2010).

Nacido en Ensenada hace 61 años, Perdomo fue Vicedecano de la Facultad de Ciencias Astronómicas y Geofísicas desde 1992 hasta 1995, y posteriormente (2001-2004) fue Decano de ese unidad académica.

El único postulante a la presidencia para 2014-2018 es investigador del CONICET y profesor de grado en las materias Astronomía Práctica y Sistemas de Referencia Modernos. Además, es docente en la Maestría en Geomática, en la asignatura Posicionamiento Satelital.

En su presentación como candidato, no quedaron dudas de que su gestión intentará profundizar las políticas de Tauber. En aquél entonces el futuro Presidente aseguró continuar apostando "a un modelo de Universidad basado en el consenso, en la convicción de que el debate y la discusión en el seno de la comunidad académica nos permite trazar y luego alcanzar grandes objetivos”.

Sobre los principales lineamientos de su propuesta electoral, uno de los más importantes que se planteó es “la necesidad de reforzar las políticas de retención de alumnos con el objetivo de incrementar la cantidad de egresados, garantizando siempre una educación de calidad”.

En sus declaraciones a los medios, Perdomo insiste siempre con el tema (tan debatido y en constante conflicto) del ingreso a la Universidad.

Refiriéndose al conflicto de Medicina, por ejemplo, había asegurado que el conflicto sobre el ingreso libre y gratuito (así lo establece el Estatuto), “se resolverá cuando tengamos otra Ley de Educación Superior”.

Una de las particularidades de Perdomo es que no tiene afiliación partidaria y nunca la tuvo. Sin embargo, se reconoce a sí mismo como un observador de la realidad y el contexto, desde donde aplica su crítica.

El actual vicepresidente de la UNLP manifiestó muchas veces su compromiso con la educación superior como un bien público social, un derecho humano y universal y un deber del Estado.

En su lanzamiento, reconoció: “Aún hay grandes sectores de la sociedad que siguen sin poder ingresar a la Universidad; por eso nuestra tarea debe estar enfocada en sumar a todos aquellos que quieran ingresar a la UNLP: si no les damos a todos la posibilidad, el concepto de gratuidad pierde sentido”.

Mirando al futuro, la postura parece ser ante todo, integradora y progresista. "La necesidad de volcar mayor investigación aplicada, mayor investigación tecnológica e impulsar el arte y cultura en la sociedad, depende de que nosotros valoricemos debidamente a la gente que lo hace” había expresado Perdomo.

Apostando fuertemente a la extensión universitaria, el futuro Presidente ya expresó su objetivo de exportar el modelo extensionista de la UNLP hacia otras Casas de Estudio del mundo. "Muchas universidades, inclusive del exterior, miran con atención el trabajo de nuestro en este aspecto. Nosotros tenemos la posibilidad de generar políticas de apoyo, de ayuda en muchos países latinoamericanos”.