¿Nos cuenta cómo ha sido su trayectoria hasta llegar a la Cámara de Diputados?

Yo entré por el Movimiento Independiente Justicia y Dignidad, conducido por Raúl Castells, que hizo una alianza con los hermanos Rodriguez Saá, y conformaron la lista “Compromiso Federal”, donde fui candidata a segunda diputada nacional. Gracias a los votos que sacamos pude ingresar al Parlamento

¿Cómo se fue alejando de ese espacio político y comenzó a tener posiciones más dialoguistas con el gobierno?

En líneas generales siempre estuve con los Rodriguez Saá, porque soy agradecida de las oportunidades que me da la vida. Ellos decidieron armar un bloque un poco distinto, donde llegamos a ser 23 diputados: algunos peronistas, los de De Narváez y los de Reuteman. Se hizo el Bloque del Peronismo Federal, con 23 miembros. Pero después, no hace más de un mes, las reuniones no se estaban haciendo y se ha decidido que los que estábamos en Compromiso Federal armemos cada uno nuestro propio bloque. El mío, que va a ser independiente de cualquier interbloque con el resto del Peronismo Federal se va a llamar Frente de Inclusión Social.

¿En ese entonces comenzaron las disputas con Raúl Castells?

La relación con Castells venía de mal en peor, y cuando llegamos a la instancia en la que yo abandono el partido descubro que estaban convocando a reuniones para sancionarme o echarme por haber votado el Presupuesto 2014. Yo les dije que yo no me arrepentía de lo que había hecho, y que no molestara a mis compañeros, que no hacía falta que hicieran ninguna votación porque yo me iba del movimiento sin que me tuvieran que echar, y así fue. Pero no voy a entregar mi banca, como está queriendo él.

¿Políticamente qué es lo que la divide con Castells?

La verdad es que no sé para qué lado se inclina en este momento. Dice estar enojado porque fuimos opositores durante muchos años, de distintos gobiernos. Todos los que en algún momento pertenecimos a un movimiento piquetero, del que aún me siento orgullosa, hemos defendido nuestros derechos y nos fuimos agrupando porque en un momento este sistema nos había dejado fuera del mercado laboral. Nos fuimos juntando y peleando para lograr trabajo genuino, pero fue imposible para algunos. Muchos pudimos volver a conseguir empleo, pero otros no. Por ejemplo, hay compañeros con 50 años a los que le resulta imposible llegar a tener algún trabajo. Siempre hemos peleado por nuestra clase y vamos a seguir peleando.

Pero no respondió la pregunta: ¿cómo caracteriza políticamente a Raúl Castells?

Si él en este momento tiene una inclinación política hacia algún lado nuevo, yo lo desconozco. Dice que está muy enojado, que no apoya estas políticas. Supongo que encontrarse con que la diputada de su partido sí estaba de acuerdo con dialogar sobre el Presupuesto 2014 me imagino que le habrá caído un poco mal, por eso es que hizo todo lo que hizo y está hablando estupideces. Después de tantos años lo conozco lo suficiente.

En todo este tiempo fuimos aprendiendo que se debe escuchar al adversario, y dialogar, eso abre nuevas posibilidades. Pero para Castells y quienes lo rodean yo no tengo capacidad ni neuronas para aprovechar esa instancia de discusión, me subestiman mucho.

¿Por qué razón?

Y, el machismo yo lo sufro mucho más fuerte que en otros espacios. Hasta el día de la fecha, pasados casi dos años de trabajo legislativo en el partido, nunca pude votar por mis propias convicciones, siempre tuve que estar esperando qué decía la “asamblea popular” o qué decía Raúl Castells. Porque “la asamblea” era manejada por Castells.
Pero me rebelé porque voy escuchando, voy aprendiendo. Después de 6 ó 7 horas de sesión analizando las posiciones de oficialistas y no oficialistas, uno va formándose. Por eso digo: para aquellos que piensan que no tengo neuronas, he aprendido un montón, pero les agradezco a todos los que hicieron posible que yo esté ahí. Ahora escucho, comparo, antes de que asumiera la Presidenta nosotros apagábamos los televisores, estábamos mentalizados de que era nuestro enemigo, y a los enemigos no había ni que escucharlos.

¿Y qué percibe que fue cambiando de la realidad política que favoreció esa apertura de su parte?

Cambió que fui escuchando. Cuando no estuve de acuerdo dije que no estaba de acuerdo, y cuando estaba de acuerdo reconocí que muchas cosas se hicieron bien, y que si algunos compañeros mínimamente tienen algo es por la política que se está llevando adelante. Hay montones de cosas que solucionar, pero aportemos nosotros nuestro granito en este momento. A la Presidenta me senté a escucharla con más atención cuando estuvo en Ezeiza. Pedía a todos los legisladores de los distintos partidos políticos que la acompañaran en la votación por el Presupuesto, para poder seguir trabajando. Y entonces yo me planté con eso, y dije que sí porque por ahí sea una herramienta buena para mí, para acercarme a dialogar más.

¿O sea que su apartamiento de Castells tuvo como única causa la necesidad de establecer un canal de diálogo con las autoridades nacionales?

Me parece que si uno no dialoga, nunca podrá lograr nada. Hay que dialogar para poder entender montones de cosas, nosotros no éramos así. En una organización social sabés que si no dialogás no podés conseguir cosas para los compañeros ni para nadie.

Pero Castells estalló de bronca por su alejamiento…

Esta vez me han dañado tanto, porque han dicho de todo: que me pagaron dos millones de pesos, que me regalaron una camioneta lujosa, que viajé a Brasil, cualquier disparate. Esos son sus únicos argumentos para no abrir canales de diálogo. Castells entabló una persecución, y lo reproducen muchos, sobre todo Radio 10, que no me da la oportunidad de hablar a mí también. Ayer a la mañana, mientras él se llenaba la boca desprestigiándome, me pidieron de la emisora que hablara para hacer mi descargo. Me quedé esperando hasta el día de hoy, y sigo esperando el llamado para que me den la oportunidad de ser escuchada, yo también tengo mi opinión sobre las cosas que pasaron.
Yo sigo viviendo en un asentamiento, como lo he hecho siempre, cerca de un arroyo, con los mismos vecinos, he donado hasta el día de hoy la parte de mi sueldo como le había prometido al partido.

¿Es un porcentaje importante?

Mucho más que importante. Era un compromiso únicamente mío como diputada, pero después se acoplaron los asesores que también fueron donando su parte. Pero peleamos por trabajos genuinos, porque no queremos más un plan social, una bolsa de alimentos, queremos que vuelva la mesa familiar. Entonces yo también me puse fuerte y dije: quiero que mis empleados cobren lo que tengan que cobrar. Estoy peleando por toda la clase trabajadora, que es el motor de nuestro país.

Ud. dice que dentro del Movimiento decían “que no tenía neuronas”. ¿La denostaban para que renunciara a su banca?

Hoy puedo pensar cualquier cosa. Siempre he trabajado para que el líder máximo de la organización, Raúl Castells, sea el que nos represente, pero creo mucho en Dios y él sabrá por qué me tocó estar acá y demostrar que también puedo hacer cosas sin que me estén mandando. Ya corté la cadena, quiero trabajar, quiero que mis compañeros trabajen y ganen lo que tienen que ganar.

¿Qué espera para los próximos días?

Él habla de mí y va a seguir hablando y me va a ensuciar por todos lados. Por eso hice una conferencia de prensa el viernes para que también me escucharan a mí. No fueron los medios opositores, que me hubiese gustado que oyeran mi palabra. Los medios cercanos al gobierno tampoco fueron, apenas se acercaron algunos periodistas radiales y de “El Parlamentario”. Con el equipo de compañeros que tengo grabamos la conferencia para poder subirla a las redes sociales.

¿Le gustaría tener alguna reunión con la Presidenta de la Nación para plantearle la agenda que tiene usted como dirigente social?

Yo voy a seguir trabajando de la misma manera, nada más que más libre.

¿Cómo le cayó la noticia de la operación de Cristina?

Bastante mal, como a cualquier compañero en esos casos. Ella es la que lidera nuestro país y no podemos más que estar esperando su recuperación.

¿Comparte la agenda del movimiento feminista?

Sobre la despenalización del aborto, siempre dije que nos tienen que dejar tomar las decisiones que querramos. Si estamos dispuestas a abortar, que nos den todas las herramientas para cuidar nuestra salud. Y si estamos dispuestas a continuar con el embarazo, que también nos den las herramientas para que podamos llevarlo adelante.

Johanna Santalucía – @joha_santalucia
Nicolás Harispe – @nicolasharispe