La legislatura bonaerense aprobará la Ley de Paritarias Municipales que regula la actividad laboral de los empleados públicos de los municipios bonaerenses para que, entre otras cosas, puedan discutir salarios con cada intendente.

En diálogo con INFOBLANCOSOBRENEGRO, Rubén “Cholo” García, secretario General de la Confederación de Trabajadores Municipales de la República Argentina (CTM) y titular de la Federación de Sindicatos Municipales Bonaerenses (Fesimubo) aseguró: “Se cruzan varias sensaciones, muchas alegrías, muchas luchas”.

Hasta ahora la ley de los municipales es la 11.757, aprobada en 1997, que según todos los gremios de empleados municipales precarizó el empleo del trabajador comunal. Para el día de hoy, ambas Cámaras acordaron también dar tratamiento al proyecto de ley que deroga el cuestionado Estatuto.

“Un trabajador contratado es un trabajador que no tiene libertad; va a buscar un crédito al barrio y no lo dejan. Creo que estamos cambiando el paradigma de las relaciones laborales entre los municipios y los trabajadores”, dijo García.

“Cuando llegué a ser legislador pedí la paritaria, la negociación colectiva y la derogación de la ley. Fue en el 2006. Ahora Hernán Doval, mi secretario adjunto en Avellaneda, reeditó el proyecto. Vino el fallo de la Corte Suprema, se apresuró todo y gracias a Dios tenemos la media sanción”, relató el titular de Fesimubo.

Según se pudo saber, el proyecto de ley ya cuenta con los votos necesarios para ser aprobada. El FPV y la UCR comprometieron su voto favorable y eso garantiza el piso para ser sancionada. En tanto, el Frente Renovador adelantó que votará negativo argumentando la necesidad de mayor autonomía municipal, para que la paritaria provincial sea no vinculante.

“Creo que la voluntad política está. Bajaría de vuelta a diputados por algunas reformas”, explicó García y detalló: “Sobre todo situaciones de redacción. Hubo hincapié también en el tema de que no puedan tener los municipios más del 20 por ciento de contratados”.

Ese artículo fue eliminado en Diputados y el bloque de la UCR condicionó su acompañamiento a que se reponga el 20 por ciento pero con una proyección de 5 años.

“Otra cosa importante, que nosotros habíamos puesto en el primer proyecto es que la Provincia asista económicamente a aquellos municipios que no puedan pagar el salario mínimo vital y móvil. En el Senado se agregó esto y queda instituido que aquel municipio que no pudiera llegar a pagar el salario, la Provincia con un fondo especial lo tiene que asistir”, aseguró el titular de Fesimubo.

De acuerdo a las estadísticas de los gremios municipales, en toda la provincia de Buenos Aires, un 60 por ciento es personal contratado, de planta transitoria, que realizan tareas habituales y permanentes al igual que un trabajador de planta.

“El Frente Renovador no acompaña, y uno se preguntaba por qué. En el municipio de Tigre sobre 3650 trabajadores, sólo son de planta permanente 390, el 9,82 por ciento. Eso es tener a los trabajadores municipales en un sistema precarizado, con miedo, que si uno manifiesta o se quiere expresar al otro día es un cesanteado sin derecho a indemnización. Eso permite la 11.757”, expresó García.

Sobre la precarización laboral de los municipales, el sindicalista aseguró que se repite en todas las localidades bonaerenses. “Hay algunas excepciones, por ejemplo en Avellaneda, donde tenemos el 95 por ciento en planta permanente, pero es una larga lucha de los trabajadores municipales. Pero la mayoría generalizada, el porcentaje da 60 por ciento de contratados. Algunos que llevan trabajando 15 o 16 años”, explicó el secretario General de la Confederación de Trabajadores Municipales de la República Argentina.