El control sanitario y la expedición del certificado, junto a una dieta pertinente, serán promovidos por los centros de salud más cercanos a cada centro educativo.

“Anteriormente médicos de la Municipalidad brindaban una asistencia que dejaron de dar y ahora buscamos restablecerla por ordenanza. Lo que se busca es que los profesionales de los centros de salud vayan a las escuelas controlen con una libreta sobre todo el talle y peso de los chicos, aparte de la vacunación que está regulada por la Asignación Universal”, detalló Bruera.

Asimismo, la iniciativa establece que las instituciones escolares deberán presentar la evaluación realizada por los profesionales ante el Concejo Escolar. Además, se otorgará un reconocimiento económico a los médicos que realicen dicha tarea.

“Un niño que está expuesto a situaciones de riesgo bio-psico-social como la falta de estimulación afectiva, cognitiva y las situaciones de violencia, es propenso a problemas madurativos y a presentar síntomas de desnutrición. Sumado al contexto económico actual, vive en peligro permanente”, explicó Sonia Cotliar, presidenta de la ONG Asistir.

En ese marco, el edil consideró que "es necesario que el Estado y las instituciones reúnan las condiciones necesarias para que los niños accedan a un constante control sanitario”, y agregó: “La única manera de resguardar a los niños de esta contingencia es articulando todas las medidas posibles de bienestar en materias de salud y educación”.

“La Libreta Sanitaria Escolar desde los 6 a los 18 años es un instrumento indispensable de prevención, detección de enfermedades, estímulo psicológico y social. Es un eje fundamental de una adecuada Educación para la salud”, detalló Cotliar.

El proyecto fue elaborado con la colaboración de distintos comedores de la ciudad. Rosa de Jesús de Altos de San Lorenzo, aseguró que: “Nosotros vemos a los chicos caracolitos, que no tuvieron la alimentación necesaria. Duele que los nenes estén esperando que empiecen las clases para asistir al comedor del colegio. Ya no se entregan alimentos, ni leche, ni nada."

Por su parte, el director de Derechos Humanos de Ensenada, Carlos Dabalioni, criticó: “En este municipio no se ve articulación entre todas las áreas que están comprometidas en garantizar derechos. Esto tiene que ser un disparador para revertir la situación”.