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Política | 12 may 2021

"Era el mejor de nosotros", aseguró

Echegaray: "El Pirata Drake era nuestra especie de 'Daniel El Rojo' de El Mayo Francés, lo mirábamos y nos brillaban los ojos"

"Forjó una camada de militantes, entre los cuales me incluyo", dijo, por su parte, Leonardo Rocheteau.


Por: Nicolás Harispe

 Alejandro Echegaray, además de ser en la actualidad un reconocido dirigente de la UCR que desempeñó el rol de diputado nacional por Juntos por el Cambio (JxC), fue junto con Drake uno de los dirigentes estudiantiles del radicalismo más conocidos en La Plata.

"Yo era un poco menor. Ingresé a la UNLP cuando él ya era "El Pirata", el primer presidente de la Federación Universitaria (FULP)", aclara en el comienzo de la charla con Info Blanco Sobre Negro. 

"Empecé la universidad en 1983 y El Pirata  ya era un líder estudiantil nato. Lo primero que aparece entre los recuerdos de esa etapa son unas jornadas que hicimos contra el rector (Guillermo) Gallo", menciona el ahora dirigente nacional del radicalismo, que compara a su amigo y correligionario de una manera muy afectuosa y colorida: "Era nuestra especie de Daniel El Rojo de El Mayo Francés, lo mirábamos y nos brillaban los ojos cuando lo veíamos conducirnos".

"Pero además fui su amigo. Estudié la ultima materia  con él y nos recibimos juntos. Se podría decir que los dos habíamos colgados la carrera por un tiempo largo y nos reencontramos en esa tarea. Compartíamos vacaciones en familia, mis hijos eran amigos de sus hijas, pasamos muchos momentos familiares en común,  para mí es un hermano de la vida", añade en el diálogo con este portal.

Además, aunque reconoce que la dinámica interna de la UCR no le permitió integrar las listas partidarias luego de su paso por la UNLP, Echegaray expresó: "Es verdad que después tuvo un perfil más bajo, pero siempre con un gran compromiso con aquella idea que nos proponía Freddy (Storani), que apuntaba a un alfonsinismo más profundo, más acorde con su compromiso político y con esa visión socialdemócrata. Nos hubiera gustado que tuviera un perfil más alto en términos partidarios, porque la verdad hubiera sido un dirigente que se podía proyectar en nombre de nuestra generación, porque era el mejor de nosotros. Y no lo digo demagógicamente, pero el mismo optó por tener un perfil más bajo".

"De todos modos, fue funcionario de Pablo Pinto como secretario de Cultura en la última gestión municipal del radicalismo. Hizo una gestión extraordinaria. Y en la etapa de Alejandro Armendáriz como gobernador fue el director de Juventud. En ese rol llevó adelante una tarea en épocas en las que, a diferencia de lo que ocurre ahora, era un área como la de la Mujer, ninguna de las dos tenían como ahora tantas políticas públicas. Pero él fue de avanzada en esos temas", agregó.

Por último, Echegaray valoró que Drake "fue un gran secretario de cultura de la Municipalidad, y después se destacó como secretario de Bienestar Estudiantil de la UNLP en la presidencia de Alberto Dibbern", y finalmente mencionó un dato poco conocido: "Fue él quien empezó a activar la reapertura del comedor universitario".  

 

Rocheteau: "Forjó una camada de militantes"

Leonardo Rocheteau fue presidente de la FULP en 1994, y años más tarde ocupó una banca en el Concejo Deliberante de La Plata.

La muerte de Drake, confiesa, fue para él una "terrible noticia".

"Tuve el honor de conocerlo en mediados de la década del 90 cuando ingresé a la Facultad de Humanidades y comencé a militar en la Franja Morada. Lo recuerdo como un militante de la democracia, defensor y divulgador de las ideas y pensamientos Reformistas", dijo Rocheteau en el diálogo que mantuvo con Info Blanco Sobre Negro.

Además, recordó que "en las charlas de formación política estaba siempre predispuesto, amable y colaborador, y era incansable con quien lo requería".

Luego destacó que "El Pirata" fue el primer presidente de la FULP desde la vuelta de la democracia "con todo lo que ello implica".

Aunque parezca verdad de Perogrullo no viene mal recordar que aquella etapa de la nueva democracia era muy "caliente" todavía, y había mucho miedo arraigado en la sociedad.

La participación política era creciente, pero los recuerdos del terrorismo de Estado estaban demasiado frescos aún.

"Le puso el cuerpo a una época muy complicada y forjó una camada de militantes, entre los cuales me incluyo, que  intentamos seguir sus pasos en defensa de la educación pública, laica y reformista", explicó Rocheteau.

Y confesó tener "el mejor de los recuerdos del querido Pirata, que marcó en conjunto y con la compañía de varios otros a toda una generación, y representó como nadie a esa época tan especial".

Finalmente, aseguró que "se lo va a extrañar mucho" a El Pirata, y afirmó: "Seguiremos su senda, defendiendo siempre los principios democráticos, sosteniendo la militancia reformista y la educación publica".     

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