

Tras la aprobación por unanimidad del “Avance del Plan de Ordenamiento Territorial y Programa de Tratamiento Administrativo de Loteos Ilegales” en el Concejo Deliberante de La Plata, el presidente del Concejo, Marcelo Galland, afirmó que "a partir de ahora los y las platenses logran una herramienta fundamental para retomar sus valores fundacionales: volver a ser una ciudad planificada, una ciudad de iguales”.
"Como lo planteamos desde el primer día, este proyecto refleja nuestra apuesta y compromiso por el diálogo y el consenso para pensar una ciudad a 30 años. No es el Plan de un gobierno o de un partido, sino de toda la comunidad platense", agregó Galland.
En este sentido, el funcionario destacó que los principales objetivos de la norma son "articular las dimensiones ambientales, sociales y económicas del territorio, garantizar un uso racional del suelo, optimizar la movilidad, proteger el patrimonio y brindar soluciones a las dificultades de acceso a la ciudad, a la tierra y a la vivienda”.
Según Galland, el Plan de Ordenamiento Territorial surge en el marco de una complejidad territorial extrema, en la cual se han exacerbado tanto las desigualdades estructurales de la población como los riesgos ambientales y sociales.
Además, señaló que como resultado de la falta de normativas adecuadas, control y planificación durante años ha tenido lugar el desarrollo de aproximadamente 450 loteos y proyectos irregulares en zonas no aptas o inundables, afectando a los barrios más postergados del Gran La Plata que carecen de acceso a servicios básicos y sufren las consecuencias del no drenaje del agua, entre otras.
"Es por eso que la elaboración de este Plan implica también la conformación del Consejo de Ordenamiento Urbano y Territorial, integrado por las universidades, los colegios profesionales e instituciones centrales en materia de urbanismo, ambiente y desarrollo humano y social", recordó.
"Esto permitirá generar un abordaje colaborativo e integral para recuperar la planificación como eje de las intervenciones sobre el territorio y como herramienta central de gestión, frenando el proceso de degradación urbano y dando lugar a un modelo de ciudad inclusiva, ordenada y sostenible", concluyó.