Finalizado el evento antivacunas que convocó en el Congreso de la Nación la legisladora del PRO Marilú Quiróz, y que autorizó el presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, el Ministerio de Salud, a cargo de Mario Lugones, emitió un comunicado junto a las provincias para respaldar el calendario de vacunación.

El texto fue respaldado por todos los ministerios de Salud provinciales, excepto los de Formosa y Buenos Aires, gobernadas por Gildo Insfrán y Axel Kicillof, dos mandatarios políticamente enfrentados con la Casa Rosada. Pero, al menos en el caso bonaerense, no se trató de una negativa de la provincia, sino el resultado de haber sido excluido por parte de Nación.

La actividad tuvo lugar pocos días después de que se conociera que el país atraviesa niveles históricamente bajos de cobertura de vacunas, sobre todo pediátricas. Especialistas aseguran que por esa debilidad reaparecieron casos de sarampión y se produjeron unas siete muertes por tos convulsa.

Pero la voz que más aisló a la diputada del PRO fue la del mismísimo ministro de Salud de la Nación, Mario Lugones. Enfáticamente, negó la versión que sostienen los antivacunas con un comunicado que difundió a través de sus redes sociales. 

Por eso, habiendo un consenso generalizado entre las fuerzas políticas con representación parlamentaria sobre este tema, cayó muy mal en el Gobierno y más aún en la oposición que Martín Menem haya dado el visto bueno para que se armara el show del hombre imán, y se expresara la diatriba antivacunas en un contexto de creciente debilidad sanitaria. 

Qué dijo Lugones

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— Mario Lugones (@Mariolugones_ar) November 29, 2025

También opinó Nicolás Kreplak

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