

Florencia Rollié solicitó a través de un pedido de informes al Ejecutivo municipal "si tiene conocimiento de la existencia de seis locales nocturnos cuyo titular sería una persona imputada en la causa de la Banda del Comisario”.
Se trata de “El Tucumano”, alias con el que se conoce en La Plata a Rubén Herrera, un individuo que se hizo conocido por ser barrabrava de Estudiantes y estar acusado de ser integrante de la mega asociación ilícita conocida como Banda del Comisario.
Herrera fue registrado en un diálogo telefónico (que fue incorporado a una causa judicial) en el que proponía “chupar” (sic) a una mujer. “Tiene un montón de plata”, aseguraba “El Tucumano” en una charla que fue grabada en el marco de una investigación.
Este oscuro individuo, según sospechan miembros del Poder Judicial, empresarios platenses y también la concejal Rollié, gracias a maniobras ilegales fue quedándose con una parte societaria de algunos boliches, y en otros, directamente con la propiedad completa.
“El denominador común de todos los testimonios que recibo sobre los boliches es que se dice que son de El Tucumano”, contó Florencia Rollié a Info BLANCO SOBRE NEGRO en una entrevista realizada este martes.
El mecanismo
El Registro de Expendio de Bebidas Alcohólicas (REBA) es una surte de “filtro” que deja a muchos empresarios o comerciantes de la noche fuera de juego. Se puede obtener haciendo los tramites correspondientes, pero según pudimos comprobar en charlas con dueños de locales nocturnos “los responsables de otorgarlo hacen que conseguirlo sea casi imposible, ponen trabas absurdas y siempre buscan que se termine en una arreglo por izquierda”.
Además, hay otra parte de los locales nocturnos que no deberían acceder a ese Registro (el REBA) porque no cumplen con los requisitos necesarios. Pero sin ese permiso para expender bebidas alcohólicas, no hay negocio en la noche.
La forma más fácil, segura y corta de obtener un REBA, explicó Rollié a este portal, y de acuerdo a los testimonios que fue recogiendo, es acudir a este personaje ligado a la “Banda del Comisario”.
En este contexto, la concejal radical reclamó al gobierno municipal que explique “si el Departamento Ejecutivo tiene conocimiento de que el primer martes de cada mes, en uno de esos locales, los restantes comercios nocturnos debían pagar $ 20.000 para no tener problemas con el REBA y el expendio de bebidas alcohólicas, y que en la actualidad dicha modalidad se habría cambiado del 1 al 5 de cada mes en otro local del centro de la ciudad”.
También reclamó al Intendente que explique “si el Ejecutivo tiene conocimiento de la existencia de un abono de $ 6.000 semanales para ser pagados por los locales nocturnos a personas que se identifican como agentes públicos encargados de fiscalizar el cumplimiento de las normas de nocturnidad , y a los efectos de evitar la clausura”.
Las sospechas de la edil surgen de extensos encuentros con vecinos de la ciudad, ya sea damnificados por los ruidos molestos, o por los negocios molestos es decir, ex empresarios que sufrieron maniobras de gente vinculada a la nocturnidad y de fluidos vínculos con las áreas de control.
Además, Rollié solicitó a Garro en el mismo pedido de informes que explique “si tiene conocimiento de la solicitud de 200.000 pesos a aquellos locales nocturnos que tienen trámites realizados pero cuya habilitación es como ‘Restobar’ y que no fuera otorgada, al efecto de agilizarle dicho trámite y otorgarle el certificado correspondiente. Y que esa suma sería del doble ( 400 mil pesos) en el caso de aquellos que requieren habilitación de Restobar con manifestaciones artísticas. Y si tienen conocimiento que cuando los solicitantes de las mismas manifiestan carecer de esa suma, el requerimiento por quienes dicen ser agentes públicos es de un porcentaje del capital del negocio al efecto de convertirse en socios de esos emprendimientos”.
Esto último, las coimas “en porcentaje del capital accionario” es lo que la concejal vincula con el accionar del barrabrava “El Tucumano”. Nos lo explicó en la entrevista: “El mecanismo que describen es que él garantizaba que no hubiera problemas con el REBA, por medio de una cuota mensual”.
“Si no entregaban una suma importante de dinero, los clausuraban, y los que no podían pagar o se atrasaban tenían que negociar parte de la sociedad”, contó Rollié, de acuerdo a lo que pudo recabar en charlas con vecinos, comerciantes y empleados municipales.
EL caso de Emanuel Reyes
En el pedido de informes que realizó la concejal de la UCR, también se requirió al Departamento Ejecutivo que brinde detalles sobre “cuáles son las razones por las que el Sr. Emanuel Reyes, que revista como Director General de Inspecciones , dependiente de la Secretaría de Convivencia y Control Ciudadano, no habría dado cumplimiento a lo dispuesto por la Ordenanza 11.629 que determina la obligatoriedad de presentación de las Declaraciones Juradas Patrimoniales para funcionarios y concejales”.
Dijo Rollié a Info BLANCO SOBRE NEGRO : “Todo lo que cuentan sobre Reyes algunos ex empleados del municipio y muchos comerciantes, es que tiene un nivel de vida que no se condice con su sueldo, y cuando vamos a ver su Declaración Jurada, notamos que llamativamente no fue presentada”.
Pero eso no es todo: Rollié se encontró con un panorama, por lo menos, muy irregular: “Hasta ayer habían presentado sus DD.JJ. sólo 212 personas, cuando debería haber cerca de 500”, explicó la concejal.
“El cargo que tiene Reyes es muy sensible, es el responsable de las inspecciones, resulta muy sospechoso, debería explicar por qué omitió cumplir con ese deber, y justó él que está en esa área tan sensible”, aseguró.
“Muchos vecinos duermen con clonazepán”
Hay varios locales nocturnos que realizan fiestas regularmente, y para los vecinos que viven en las proximidades los fines de semana son una pesadilla. Lo pudimos comprobar en dialogo con gente cercana, por ejemplo, a La Casona (44 entre 10 y 11). El volumen que le ponen a la música es tan alto que “muchos vecinos toman clonazepán u otros fármacos para poder dormir”, relataron a la edil decenas de ellos.
Hace poco Info BLANCO SOBRE NEGRO dio cuenta de ello en una nota que, además, tuvo un agrio momento: cuando fuimos a consultar a uno de sus dueños la respuesta fue un golpe “casual” sobre el cronista de este portal propinado por alguien que ingresaba sin parar cajones de bebidas alcohólicas.
“Con la Municipalidad está todo bien”, dijo en ese momento una persona que se identificó como “uno de los dueños”.Tras la disimulada agresión decidimos retirarnos del lugar. Pero consultamos a varios vecinos de la cuadra que no se explican cómo es que puede funcionar ese local con tantos disturbios en la puerta y ese ruido ensordecedor que altera a toda la zona.
“El denominador común de todos los boliches es que se dice que son de ’El Tucumano, La Casona también”, concluyó Rollié.