“Esta conferencia es una oportunidad extraordinaria para conocer el Zen y su práctica bajo la guía de una maestra certificada”, explicaron miembros del Dojo Zen de la Plata, que organizan la conferencia.

También informaron que la Maestra Dosei dirigirá un pequeño retiro de práctica intensiva el domingo 10.

Acerca de la Maestra Dosei

La Maestra Dosei continúa con la práctica del zen desde hace más de 25 años. Fundó varios centros de práctica en Uruguay y Argentina.

Actualmente es la responsable del Templo Shobogenji (Capilla del Monte, Córdoba), el único Templo zen de nuestro país.

En abril de 2015 recibió la certificación como Maestra de manos del Maestro francés Kosen Thibaut y se convirtió en la primera Maestra Zen argentina.

Desde entonces dedica su actividad a la difusión de la práctica del budismo zen en nuestro país, a través de la realización de conferencias y retiros. En particular, en el corriente año la Maestra Dosei fue una de las disertantes en el 8vo encuentro “María Cher, mujeres que inspiran”, llevado a cabo en la Rural de Buenos Aires.

Acerca de la práctica del Zen

El Zen no es una religión, ni una filosofía, ni una moral. La esencia del Zen es el zazen, la meditación sentada, con la concentración puesta totalmente en la postura y la respiración.

Acerca del Dojo Zen de La Plata

La conferencia y otras actividades de la Maestra Dosei durante su visita a la Ciudad de La Plata serán organizadas por el Dojo Zen de La Plata, una entidad sin fines de lucro que funciona desde hace más de 15 años en nuestra Ciudad continuando y difundiendo la práctica del Zen.

El Dojo de La Plata forma parte de la Asociación Zen de América Latina, una asociación civil sin fines de lucro dedicada a la difusión del Zen, con filiales en Argentina, Chile, Uruguay y Cuba.

Contacto: Teléfono: (221) 15-546-0904 (Nicolas Nessi). Email: [email protected].

Página de Facebook: Dojo Zen La Plata. Dirección: 63 N° 1158 entre 18 y 19.

El Zen en Occidente, en nuestro país y en nuestra ciudad

El budismo zen es una práctica milenaria no religiosa que ha tenido un fuerte impacto en la filosofía, psicología y en las artes orientales, especialmente en China y Japón.

A partir de principios del S. XX se ha difundido en occidente, e influenció profundamente la filosofía, la psicología y la literatura a través de grandes personalidades como los filósofos Arthur Schopenhauer y Martín Heidegger, el psicólogo Carl Joung, los escritores Aldous Huxley y Hermann Hesse, por citar algunos. En el ámbito nacional, Jorge Luis Borges le dedicó unos de sus ensayos, titulado “El budismo zen”.

Si bien la filosofía del Zen es conocida en Occidente desde principios del s. XX a través de libros y ensayos, la práctica del Zen, la esencia desde donde emana toda su filosofía, fue transmitida después de mediados de siglo.

En Europa, el Maestro japonés Taisen Deshimaru introdujo la práctica del Zen a fines de la década de 1960. Como resultado de su misión se han creado cientos de centros de práctica que nuclean a miles de practicantes en Europa, África y en las Américas.

En la década de 1990 el heredero espiritual del Maestro Deshimaru, el Maestro francés Kosen Thibaut, transmitió la práctica del Zen en nuestro país. Como fruto de su trabajo y el de sus discípulos, hoy en día existen centros de práctica en las ciudades más importantes del país, que sustentan la práctica de cientos de personas.

En nuestra ciudad, el Dojo Zen de La Plata de la Kosen Sangha, una entidad sin fines de lucro, desarrolla la práctica cotidiana del zen ininterrumpidamente desde hace más de 15 años. Allí se nuclean personas que, más allá de su nivel socio-económico, creencia religiosa, tendencia política o edad, se interesan en volver a la raíz de su propia vida.

“Desde ese espacio se difunde y ofrece este tesoro simple pero inestimable a todas aquellas personas que anhelen hacer la experiencia. Y bien vale decir, que la práctica del zen se encuentra al alcance de todos, no requiriéndose conocimiento ni experiencia previa”, explicaron los organizadores de la conferencia.

El Dojo Zen La Plata, forma parte de la Asociación Zen de América Latina, asociación civil sin fines de lucro con filiales en Argentina, Chile, Uruguay y Cuba.
La esencia del Zen, la práctica de zazen.

En las palabras del Maestro Deshimaru, el monje que transmitió el zazen desde Japón a Europa:

“Zazen es difícil, lo sé. Pero practicado cotidianamente es muy efectivo para la ampliación de la conciencia y el desarrollo de la intuición. Zazen no sólo desprende una gran energía, es una posición de despertar. Durante su práctica no es necesario obtener algo. Su objeto es sólo la concentración en la posición, la respiración y la actitud del espíritu”.

La postura:

Sentado en el medio de un almohadón redondo se cruzan las piernas en la postura del loto. En la postura del loto los pies oprimen en cada muslo zonas que comprenden los principales puntos de acupuntura correspondientes a los meridianos del hígado, la vesícula y el riñón. La columna vertebral estirada, se empuja la tierra con las rodillas y el cielo con la cabeza. Se es como un arco tendido cuya flecha es el espíritu. Las manos crean una forma ovalada armoniosa y se apoyan contra el vientre. El mentón entrado, la nuca abierta. Los ojos semiabiertos se posan a un metro de distancia.

La respiración:

La respiración Zen no es comparable a ninguna otra. Tiende a establecer un ritmo lento, poderoso y natural. Nos concentramos en una expiración larga y profunda. El aire se retira paulatina y silenciosamente, mientras que el empuje debido a la exhalación desciende con fuerza sobre el vientre. Los Maestros Zen comparan la respiración Zen al mugido de una vaca o al grito del recién nacido.

La actitud del espíritu:

La actitud del espíritu se purifica automáticamente por la concentración sobre la postura y la respiración. El ejercicio de la respiración consciente permite neutralizar los impulsos nerviosos, dominar los instintos y la pasión, controlar la actividad mental. La circulación cerebral mejora notablemente. El córtex (parte del cerebro donde se asienta la personalidad) descansa y el flujo consciente de pensamientos se detiene, en tanto que la sangre fluye a capas más profundas. Mejor irrigadas estas capas se despiertan de un semisueño y su actividad produce una sensación de bienestar, de serenidad, de calma próximas al sueño profundo, pero en pleno despertar. El sistema nervioso se relaja, el cerebro primitivo (cerebelo) entra en una plena actividad. Uno se siente plenamente receptivo, atento, en todas las células del cuerpo. Pensamos con el cuerpo, inconcientemente, toda contradicción desaparece sin gasto de energía.

Beneficios para la salud:

“La práctica de zazen es la vuelta a la condición normal del cuerpo y del espíritu. Es volver al equilibrio original del cuerpo sin recurrir a terapias externas. Zazen mejora la concentración, equilibra la actividad del cerebro y del sistema nervioso, regulariza el ritmo respiratorio y el intercambio de gases, calma la actividad cardíaca. Sus beneficios son inestimables, porque actúa sobre la raíz del equilibrio físico-emocional”, aseguran.

La enseñanza:

“El Zen no es una religión, ni una filosofía, ni una moral. Ser Zen, es practicar la gran sentada de los Budas, es decir el zazen, meditación sentada en posición del loto que es la esencia del budismo. Ser Zen, es saber hacer silencio en el interior de uno mismo y descubrir así nuestra verdadera dimensión, que entonces aparece, como si las palabras la hubieran vuelto cautiva. Por la práctica regular de zazen estamos llamados a convertirnos en hombres nuevos volviendo a los simples orígenes de la vida: respirar, tomar una postura corporal justa, comer, caminar y pensar correctamente”.