

Cuatro delincuentes irrumpieron en una vivienda y redujeron a su propietaria que luego fue llevada hasta un monte cercano para dejarla atada a un árbol. Después regresaron a la propiedad, se robaron el dinero y los electrodomésticos que encontraron y antes de huir prendieron fuego la casa.
Según refleja el diario El Día algunos vecinos relataron que los ladrones habrían estado esperando que el dueño de la casa saliera esa noche a trabajar en su taxi para luego entrar a robar.
En la propiedad estaba una mujer de unos 50 años. Los cuatro ladrones le pegaron en la cara, la condujeron a un monte de árboles y ahí la dejaron maniatada.
Los delincuentes volvieron y comenzaron a apropiarse de la plata y todo lo de valor que encontraron. Pero antes de escapar, la banda prendió fuego la casilla de las víctimas.
Según el matutino, los investigadores no descartan que el robo haya tenido “rasgos compatibles con un conflicto barrial”.