

En el marco de las actividades realizadas en Plaza Moreno en el primer aniversario de la peor inundación de la Región, el juez Luis Federico Arias, quien realizó una investigación sobre en número real de víctimas fatales, participó de una charla sobre Justicia Penal. “Hemos pasado situaciones lamentables que no nos han permitido trabajar como nosotros hubiésemos querido, pero hemos seguido adelante gracias al apoyo de toda la población”, expresó el magistrado.
“No nos brindaban la información pese a las órdenes judiciales. Los datos del Registro de las Personas la tuvimos que secuestrar. Todo para ocultarle la información a un juez”, relató el juez que la semana pasada dictó una sentencia que contabiliza 89 víctimas contra las 78 reconocidas oficialmente por el gobierno provincial. “Tampoco se nos permitió ingresar a la morgue. El comisario a cargo, Pablo Vásquez, fue revelado del cargo, pero lo jubilaron y está cobrando su mismo sueldo, tranquilo en su casa, como si nada hubiese pasado, como si no se hubiese alzado contra una orden judicial. Por lo menos lo tendrían que haber sancionado, pero quedó impune”, enfatizó Arias ante un centenar de personas que presenciaban el foro.
“La causa que inicio la procurada contra mi llegó hasta la imputación. No han imputado a Bruera, a Casal, ni a nadie, solo a mi por mis actos judiciales”, expresó el juez en lo contencioso y administrativo quien enfrenta una denuncia por haber intervenido sin tener competencia en la causa sobre las víctimas de la inundación. Además, un grupo de diputados y senadores sciolistas presentó un pedido de juicio político que Arias deberá enfrentar en los próximos meses.
Cuando finalizó su disertación, un vecino tomó el micrófono y aseguró que las víctimas eran muchas más y pidió una explicación al juez que contestó: “Quiero decirles que tenemos que ser responsables y no alimentar el mito social, porque eso genera angustia en la gente. Pueden existir más víctimas, pero si alguien habla de 350 muertos, tiene que poder decirnos al menos un nombre”.
“Hemos revelado incansablemente todos los ámbitos posibles. Tenemos testimonios, pero no tenemos gente que reclame, ni cuerpos en la morgue. Puede haber casos que se hayan escapado al rastrillaje, pero tenemos que se serios y trabajar con datos, aunque sean informales”, agregó el magistrado que solicita que se modifique el número oficial de víctimas del fenómeno climático ocurrido hace un año.
“Hemos revelado todo lo que hemos podido. Hemos investigado en escuelas, embajadas y hemos hecho todo lo que se pudo. Queda mucho para hacer, ojalá esta sentencia sea el primer paso para que otras cosas puedan surgir a la luz”, concluyó el juez.