

Dentro de los tipos de conexiones a Internet que se utilizan en la actualidad, el ADSL (Línea de Abonado Digital Asimétrica) y la fibra óptica son los más utilizados en los hogares. Sin embargo, vale la pena identificar cuáles son sus prestaciones para saber cuál conviene elegir.
La principal diferencia está en la forma en que se transmiten los datos. En el caso del ADSL, la información viaja a través de cables de teléfonos, va un módem y luego éste se conecta a la computadora.
Por su parte, la fibra óptica utiliza la luz para transmitir los datos: este sistema es mucho más rápido y, al ir directamente a un router inalámbrico, se pueden conectar más dispositivos a la vez sin que la señal pierda calidad.
Para contestar el por qué un servicio de internet para el hogar es necesario, es importante responder a la siguiente pregunta: ¿Qué proceso facilitan las líneas ADSL y fibra óptica en nuestros hogares?
Tener acceso a internet facilita muchos procesos, independientemente del tipo de conexión que se elija. Basta con hacer un repaso de las actividades diarias para identificar cómo este servicio ha hecho que todo sea más práctico.
Comunicación más efectiva: el primer aspecto que transformó Internet es la comunicación. Ahora es más fluida porque no depende solo de una línea telefónica, se puede usar el correo electrónico, servicios de mensajería y videollamadas.
Entretenimiento constante: en la red hay infinidad de contenidos o sitios que se pueden consultar en los ratos libres para entretenerse: hay servicios de streaming para ver series y películas, videojuegos de PC y de las consolas más populares que se juegan en línea y un vasto acceso a listas de canciones cuando se desea escuchar música.
Agilizar procesos: con una red de Internet en casa se pueden agilizar un sin fin de tareas o trámites. Por ejemplo, hacer la compra del mes, consultar los movimientos bancarios, pagar los servicios, recargar el celular, solicitar un turno para un estudio médico, estudiar o trabajar.