La Universidad Nacional de La Plata comenzó a planificar el próximo ciclo lectivo en el que habrá un regreso importante de las actividades presenciales. Sin embargo, para evitar grandes aglomeraciones en las aulas, las Facultades deberán hechar mano a la teconología para que las clases que se dicten en sus aulas también se emitan en vivo por plataformas online.

Las autoridades de la UNLP aseguran que el 2021 culminará con un "proceso de transición" con exámenes parciales y finales que podrán hacerse en forma virtual o presencial. En tanto, si la situación sanitaria continúa evolucionando en forma favorable, el año próximo se retornará a una presencialidad "plena" aunque diferente a la prepandémica. 

Es que ya nadie imagina como posible la existencia de cursadas multitudinarias de chicos "codo con codo". Por eso, estipulan que se deberán establecer aforos máximos, lo que conlleva a buscar una solución para que quienes no entran en el aula puedan seguir las clases en forma online a través de sus dispositivos tecnológicos.

Por otra parte, en la universidad tampoco creen que sea plausible exigirle a todos los estudiantes del interior que regresen a La Plata en 2022, en medio de una crisis económica empobreció a muchas familias a las que les resultaría casi imposible buscar un alquiler en la ciudad.

En este contexto, la UNLP planifica una importante inversión en cámaras y conectividad para que equipar la mayoría de sus aulas, de modo tal que las cursadas puedan ser presenciales y virtuales al mismo tiempo.

El vicedecano institucional y docente de la Facultad de Ingeniería, Marcos Actis, es uno de los pocos profesores que durante este año realizó sus clases en el aula. En diálogo con Info Blanco Sobre Negro, Actis explicó: "Con la red wi-fi no es suficiente para transmitir con calidad. Por eso, las aulas deberán ser conectadas con cable de red".

Además, el ingeniero explicó que dentro del universo de las cámaras existe una amplia gama que van desde los 15 mil pesos hasta más de 100 mil. Los equipos más sofisticados puden enfocar  y hacer zoom en forma automática, entre otras capacidades. De acuerdo a las características de las carreras y las cursadas, algunas se adaptarán mejor que otras. 

"No es tan simple, se tiene que poder ver el pizarrón. Dependerá tipo de clases, proyectar un power point no es lo mismo que una clase que el docente sólo habla", detalló Actis. 

Sobre su experiencia dando clases virtuales, Actis expresó: "Estoy contento con los resultados pero también resulta cansador porque falta la química de la clase presencial. Las preguntas y el intercambio con los estudiantes es muy importante".

En los próximos meses, el Rectorado deberá encabezar un plan para dotar de esta tecnología a sus 17 facultades que en su conjunto suman unas mil aulas. Alguna unidades académicas están más avanzadas y realizaron inversiones por su cuenta pero otras todavía están muy lejos de la infraestructura necesaria para el nuevo esquema.

Lo que resulta más que evidente es que no existen la cantidad de aulas necesarias para una presencialidad total respetando los aforos. La UNLP cuenta actualmente con unos 140 mil estudiantes en sus carreras de grado. Estos sistemas tecnológicos permitirán ir rotando los alumnos que acuden a las aulas, aunque cada unidad académica definirá el modo que se combina virtualidad y la presencialidad.