En el momento en que radicó la denuncia penal, contó que Sidders comenzó a acosarla cuando tenía 11 años. "En invierno, adelante de todos, me hacía poner mis manos en los bolsillos de su sotana porque decía que yo tenía las manos frías, y me hacía sentir su erección [...] Nos hacía confesarnos a solas en la capilla", relató..
"A los 12, cuando yo estaba en sexto grado, empeoró. Me preguntaba si sabía masturbarme y como le decía que no, me explicó con sus dedos, sin tocarme, cómo tenía que hacer. Después me dijo que si no quería masturbarme tenía que saber complacer al hombre al menos a través de una felación. Le pregunté qué significaba eso, no sabía. 'Chupar una pi..', me dijo", agregó. .
"Me explicó con su lengua y su mano cómo hacer una felación. Eso no me lo pude olvidar nunca más [...] Me volvió a preguntar si me había masturbado y le dije que no, entonces me propuso enseñarme a mí y a un alumno a tener relaciones sexuales, que nos iba a indicar todo mientras lo hacíamos. Me largué a llorar y le pedí que por favor no lo hiciera", relató la denunciante.