

Un día como hoy, pero del año 1885, nacía en Londres Alicia Moreau de Justo, médica y defensora de los derechos de las mujeres, además de dirigente del Partido Socialista. Falleció en Buenos Aires el 12 de mayo de 1986.
Fundadora de la Unión Feminista Nacional en 1918 y cofundadora de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos (APDH) en 1975 la dirigente socialista fue una férrea defensora de los derechos humanos y los derechos de las mujeres. Impulsó en 1932 un proyecto que buscaba el voto femenino que fuera aprobado por la Cámara de Diputados de la Nación y rechazado por Cámara Alta.
Vale recordar su reclamo en Radio Universidad de La Plata por la libertad de los más de 300 presos políticos, entre ellos mujeres, en la antesala de las elecciones de 1966 para elegir senadores nacionales en algunas provincias, cuando se reprimía a miitantes peronistas, comunistas y de otros partidos de izquierda.
Finalmente los senadores electos no pudieron asumir por el golpe de Estado del 28 de junio de 1966 contra el Presidente Arturo Illía.
"Todos los argentinos estamos en este momento profundamente preocupados por el posible éxito de la próxima jornada electoral. Nos preguntamos con ansiedad si el pueblo argentino volverá a encontrar la huella de la verdadera democracia", señalaba Alicia Moreau en la antesala de las elecciones de dicho año.
"En medio de esa inquietud hay una nota amarga en mi espíritu y yace en el conocimiento de la existencia de numerosos presos políticos que están dispersados por todas las cárceles del país", manifestó .
"He conversado con las mujeres de los presos que vienen a reclamar por la suerte del marido, del hijo y, en este momento, vuelve a mi memoria el recuerdo de una joven esposa, que estaba esperando un niño, a la que saludé dándole alguna esperanza me dice: "espero que este niño nazca estando su padre fuera de la cárcel", mencionó la dirigente.
"Todos los esfuerzos hasta el momento han sido inútiles y esto nos duele profundamente porque quisiéramos que el pueblo argentino fuera a una elección que democráticamente fuese sincera y no puede haber sinceridad democrática si hay persecusión ideológica", sostuvo la cofundadora de la APDH.
"Tal vez me pueda decir usted que muchos de estos hombres son comunistas o peronistas, es posible, pero yo no considero que a esta altura de la civilización un determinado carácter de ideas pueda ser considerado un problema", añadió Moreau de Justo.
"Basta de guerra de ideas, la humanidad ha sufrido bastante por ellas, busquemos otros medios de acción que no sea la cárcel para el hombre que no piensa como nosotros", sostuvo la luchadora feminista y confesó: "Quisiera que el Presidente de la República y el ministro del Exterior se dignaran a escuchar estas palabras que dirijo al pueblo. Hemos intentado muchas cosas para obtener la libertad de estos presos, hasta ahora todo ha sido inútil".
"Usted dirá, se preguntaba la dirigente en Radio Universidad de La Plata, ¿se puede poner en libertad a hombres que tienen un concepto distinto de la convivencia democrática? y yo les contestaré que esos hombres que se incorporan a la vida de sus familias no van a cambiar el resultado de estas elecciones pero si puede cambiar la confianza y creencia en la democracia, el gesto del Poder Ejecutivo poniendo en libertad a estos hombres demostrará que efectivamente hemos alcanzado la verdadera libertad espiritual que es la tolerancia", agregó.
Finalmento, dijo que "la tolerancia es la máxima condición de libertad espiritual, es el ministerio de la razón contra la ferocidad de los instintos, es una de las grandes conquistas de la civilización, es en nombre de esa tolerancia, de esa libertad espiritual, de ese imperio de la razón y del respeto por la democracia que yo pido aquí, en nombre de las mujeres, de los hijos y madres de esos presos, que el Poder Ejecutivo tenga un gesto de inteligencia política y los ponga en libertad antes de las elecciones".