

La Secretaría de Energía de la Nación decidió ajustar en un 18 % promedio el precio estacional de la energía eléctrica, uno de los componentes de la tarifa final junto con el transporte, la distribución y los impuestos.
El costo de generación eléctrica que pagan los usuarios subirá un 34 % para los residenciales y 50 % para los comercios e industrias. Además, las empresas transportistas de electricidad tendrán una suba en sus ingresos de 20 %. Todos estos incrementos implicarán un aumento mínimo del 18 % en la factura final.
El aumento “representa una disminución de los aportes del Estado Nacional” en concepto de subsidios, y “se aplicará de manera uniforme en todo el país”, indicaron fuentes oficiales.
La medida se tomó a través de la resolución 105/2022, publicada este jueves en el Boletín Oficial, que modifica parcialmente a la resolución 40 del 31 de enero.
“El impacto final en las facturas de usuarios y usuarias será del 18 % promedio, dependiendo de cada jurisdicción”, indicó la repartición encabezada por Darío Martínez, que a su vez aclaró que “el impacto en las facturas en el AMBA (Área Metropolitana de Buenos Aires) del precio estacional más el transporte y la distribución nunca superará el 22 %”.
Los nuevos valores se determinaron luego de la audiencia pública del 17 y 18 de febrero y abarca al precio de referencia de la potencia, el precio estabilizado de la energía para el mercado eléctrico mayorista y el precio estabilizado del transporte, que en conjunto componen el denominado “precio estacional”.
De todas formas, vale aclarar que el Ente Nacional Regulador de la Electricidad (ENRE) todavía no comunicó los incrementos de ingresos para Edenor y Edesur pero no se cree que obtengan un aumento mayor al 20 % autorizado el año pasado.
Por último, Martínez sostuvo que "el Estado no puede dejar de lado su rol planificador y regulador para que todos y todas accedan a un servicio público con tarifas justas y razonables”.