

El gremio de los gastronómicos, la UTHGRA, se declaró en estado de alerta y movilización frente a dos episodios de violencia que tuvieron lugar en una de las sucursales del conocido restaurante Chichilo. El propietario de ese comercio fue denunciado ante la justicia penal por un trabajador y su esposa (que trabaja en el mismo lugar) a quienes habría agredido física y verbalmente.
De acuerdo a lo que consta en las denuncias presentadas días atrás, un cocinero fue maltratado verbalmente y golpeado en el rostro delante de los comensales y los empleados por Franco Di Leva, el propietario del reconocido restaurante .
Al parecer, la agresión ocurrió luego de que el hombre se negara a seguir trabajando durante una hora más en el establecimiento, luego de cumplida su jornada habitual.
También denunciaron que minutos después la esposa del cocinero, que también es empleada de Chicilo, fue insultada y empujada por el mismo empresario. Y por si fuera poco, aseguran, los dos fueron inmediatamente amenazados por personal de Prefectura Naval Argentina.
“De ninguna manera vamos a permitir ningún tipo de violencia física ni verbal contra ningún trabajador”, manifestó el secretario general de UTHGRA Mar del Plata, Pablo Santín, y reclamó “resarcir inmediatamente a los dos trabajadores involucrados, sostener sus fuentes de trabajo y pedir disculpas públicas por lo sucedido”.
En ese marco el Sindicato de Trabajadores Gastronómicos y Hoteleros se declaró en estado de alerta y movilización, y anunció que prepara una medida gremial en repudio a lo ocurrido.
Santín también expresó: “Que el dueño de un restaurante salga a agredir, insultar, golpear y amenazar a un trabajador y a su compañera es algo totalmente inaudito que amerita nuestro más enérgico repudio. Nos parece muy grave también que intenten resolver cuestiones laborales recurriendo a la fuerza de Prefectura. No podemos permitir este tipo de episodios en ningún establecimiento bajo ninguna circunstancia”.
Quedó imputados por los delitos de “Amenazas” y “Lesiones” Franco Di Leva -el dueño de Chichilo-, e incluso el cuerpo médico que intervino pudo dejar constancia de la existencia de una herida en el rostro del trabajador como consecuencia del golpe recibido por su pátrón.