En el marco de la campaña "¿Qué agua tomamos, qué aire respiramos?", distintas organizaciones ambientales de Baradero se organizaron para determinar la presencia o ausencia de Glifosato y su metabolito AMPA en el cuerpo de alumnos, alumnas y una docente que asisten a una escuela rural de la mencionada localidad bonaerense.

El objetivo de la iniciativa fue "desarrollar un abordaje integral de la situación sobre los agroquímicos y su impacto en el ambiente y en la salud de las personas".

Para ello, el pasado 29 de abril se enviaron muestras de orina de los mencionados integrantes de la comunidad educativa al Laboratorio Farestaie de la localidad de Mar del Plata y en los últimos días se obtuvieron los resultados. Según le contó Mauro González, integrante de la organización ambientalista Relea-Baradero, a Info Blanco Sobre Negro "tres muestras dieron positivo, dos niñas y la docente", casi el 40 % del total.

 

 

 

 

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Ante dicha situación, las organizaciones reclamaron a las autoridades locales "que tomen cartas en el asunto y asuman de una vez su responsabilidad por la cual fueron elegidos como representantes del pueblo y hagan valer, al menos, el artículo 41 de la Constitución Nacional".

"El derecho a una infancia libre y el goce pleno de la salud, debe ser impostergable y que deben hacer cumplir los funcionarios y concejales de manera unánime, sin grietas y mezquindades políticas. Bregar por la salud de todos y todas quienes estamos expuestos de manera directa e indirecta al uso indiscriminado de agroquímicos y fertilizantes en Baradero es una de sus funciones", concluyeron los ambientalistas.

Cabe destacar que en la localidad de Baradero existe una mesa de trabajo entre el municipio, la Sociedad Rural y las organizaciones ambientalistas para definir una ordenanza que regule el uso de agroquímicos, en la que hay distintas posturas.

Por un lado, la Sociedad Rural realizó dos propuestas. En primer lugar pidió que se establezcan 25 metros de exclusión, donde no se pueda fumigar,  y 25 de amortiguamiento donde se puedan usar únicamente agroquímicos "banda azul y banda verde", y luego elevó la propuesta a cien metros.

Lo mismo ocurrió con las organizaciones ambientalistas que en un primer momento propusieron que la cantidad de metros en los que no se pueda fumigar sean 1095 y en una segunda propuesta lo bajaron a 500. En tanto que por el lado del municipio se propone entre 200 y 300 metros.