

Este martes 3 de mayo, a las 16 horas, el secretario de Hábitat y Desarrollo Territorial de la Nación presentará su libro de poesías “Padre Final” (Editorial de la Universidad Nacional de La Plata – EDULP) en el Centro de Artes de la Universidad Nacional de La Plata, ubicado en la calle 48 N° 576 entre 6 y 7.
La actividad, que contará con música en vivo a cargo de Paula Amaya y Carlos Mancinelli, será a beneficio de la organización social del padre Francisco “Paco” Olveira y del Centro de Estudiantes Universitarios (CEU – JurSoc – UNLP) “Juan Miguel Scatolini” de la unidad penitenciaria N° 31 de Florencio Varela.
El título es un homenaje a Juan Miguel Scatolini, padre del autor y referente de los derechos humanos de la capital de la provincia de Buenos Aires.
Scatollini padre fue asistente social criminológico del Servicio Penitenciario Bonaerense y militante de la Juventud Peronista, perseguido desde 1974 y secuestrado en 1976 junto a su compañera y su pequeño hijo de dos años. Pasó por La Cacha, la Unidad 9 y el centro clandestino que funcionó en la sede platense de Infantería de la Policía Bonaerense, en 1 y 60.
Se especializó en temas relacionados con la readaptación de personas privadas de su libertad, estrechando lazos con la tendencia reformista del sistema carcelario argentino impulsada por Roberto Pettinato. Su trayectoria en ese campo se vio reflejada en el penal de Florencia Varela donde el centro de estudiantes de esa unidad penitenciaria lleva su nombre.
Fue el primer director de Derechos Humanos de la provincia de Buenos Aires, habiendo sido posteriormente Subsecretario de Niñez, Defensor del Pueblo y director Provincial de Población Carcelaria del Ministerio de Justicia bonaerense.
Adherente permanente de la presentación de los Informes Anuales sobre violaciones a los derechos humanos de la Comisión provincial por la Memoria (CPM), el histórico dirigente peronista impulsó la designación del organismo como Mecanismo Local de Prevención de la Tortura.
Su testimonio, junto al de otros sobrevivientes y ex detenidos, entre ellos Adolfo Pérez Esquivel, Eduardo Jozami, Eduardo Anguita y Francisco “Barba” Gutiérrez, permitió condenar en 2010 a 15 represores de la Unidad 9 en la justicia federal por diversos delitos de lesa humanidad, cometidos contra más de 90 víctimas encarceladas. El libro es ilustrado por la reconocida artista platense Mora Petraglia y prologado por Carlos Vecchio.
“El libro es un homenaje a mi papá, que fue el que me incursionó en el mundo de la poesía”, destacó Luciano Scatolini a Info Blanco Sobre Negro, y agregó que dicho género “viene desde el fondo de la historia como humanidad”.
“El componente poético nos traslada al mundo de los sueños, permite comunicarse con el lector desde un lugar de mucha creatividad y tiene la capacidad, en varios versos o en uno solo, de describir el mundo”, agregó el funcionario nacional.
Sobre el proceso de escritura, Scatolini, sostuvo que generalmente escribe las poesías en el teléfono y destacó que “siempre hay un disparador, una situación que te conmueve, ganas de poner en palabras esa situación que te moviliza, dejar una huella, que es también una búsqueda poética”.
“La muerte de papa, que fue trágica porque tuvo que ver con el COVID-19, es de esos momentos donde uno resignifica la vida y los vínculos y en el caso mío tuve la necesidad de escribir como forma de duelar”, detalló el platense.
Por último, el secretario de Desarrollo Territorial y Hábitat de la Nación recordó que sus primeras incursiones poéticas “fueron muy atrevidas, desvinculadas de una escuela”.
“Después fui encontrando mi propio estilo y empecé a formarme más en la rigurosidad que tiene escribir, he leído autores contemporáneos y los clásicos como Pablo Neruda, Paul Becker, Roberto Themis Speroni, Armando Tejada Gómez y Antonio Aguero, además de los poetas anónimos que tienen una gran capacidad para escribir.