Actualmente, contar con competencia para trabajar de forma segura en alturas es esencial. Diversas empresas e instituciones entrenan en la tarea de embellecer fachadas, que gana cada vez más demanda en el país.

Los frentes cubiertos de vidrio dejan paso a un amplio paso de luz natural y ofrecen una vista excepcional al exterior, aunque a la vez son todo un desafío de aseo porque demandan gran mantenimiento y cuidados para alcanzar un aspecto estético. Dedicarse a ello demanda especialización y condiciones físicas apropiadas, lo que lleva a diferentes empresas como servicio de limpieza – Kiway, a especializarse en este sector.

Entre las cualidades y habilidades necesarias, un limpiacristales de altura es un profesional capaz de manejar equipamiento especial, y llevarlo a cabo en extraordinarias condiciones de seguridad. Algunas veces a muchos metros de altura. Es decir, no se trata de un trabajo que pueda realizar cualquier persona.

Esa es la razón por la que los servicios de limpieza de vidrios en altura que operan en esta actividad no les resulta tan sencillo dar con personal que, además de estar calificado para el trabajo, esté listo para realizarlo. Asimismo, y aunque disponga del conocimiento y las habilidades, precisará de algún tiempo para aprender a higienizar de forma correcta ventanales y moverse con seguridad arriba.

Otra de las dificultades del trabajo en altura son las estaciones climáticas. Según la época en la que se haga la tarea, un limpiador de este tipo puede que deba afrontar largas horas con malas condiciones como lluvia, viento fuerte o altas temperaturas, e incluso lidiar con los insectos estacionales.

Como se observa, la tarea del limpiavidrios a muchos metros del suelo requiere de un grado de entrenamiento y certificación en la materia importante. Por un lado, las empresas que brindan este tipo de soluciones precisan contar con equipamientos certificados, similar al que puede utilizarse en montaña o rescate; y su personal debe contar con calificaciones aptas para utilizarlo con máximo rigor. Además, el empleado precisa de mesura y claridad mental fuera de lo común, para realizar este tipo de prácticas de manera coordinada y hábil.

De acuerdo con esto y en igual sentido, al margen del conocimiento y compromiso sobre la limpieza de vidrios, por sus características, la empresa de higiene debe contar con certificación de trabajo en altura, y con las herramientas necesarias para ingresar de manera cómoda a ventanas, cristales y marquesinas.

Una vez en la práctica, el personal a cargo de la empresa tiene la obligación de cumplir con las normas de prevención reguladas, asistir a las capacitaciones pertinentes y utilizar de manera adecuada los materiales, equipos y elementos de protección dados para la actividad, y dar parte de cualquier hecho que pueda resultar de riesgo en el ejercicio de su tarea.