“Fernandito” llama la atención por su tamaño. Con sus casi dos metros suele caminar por las calles de zona norte pero también por el Casco Urbano de La Plata.

“Habla y se ríe solo pero es inofensivo”, contó a Info BLANCO SOBRE NEGRO Pablo, un vecino de Ringuelet que conoce a “Fernandito” desde hace años. “Es muy alcohólico. A veces algunos se asustan porque se tira a dormir en la puerta de algunas casas pero nunca generó un problema”, remarcó.

El viernes por la noche comenzó a circular un rumor que señalaba que este personaje emblemático del barrio había fallecido luego de ser atropellado en Camino Centenario y calle 511.

Por su popularidad, la noticia corrió como un reguero de pólvora y llegó a oídos del cura de la parroquia “Nuestra  Señora  de  la  Anunciación”, ubicada en calle 514 entre 7 y 8, donde Fernandito durmió una innumerable cantidad de noches.

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Compungido, el padre Carlos dedicó la misa del sábado a la memoria de Fernandito. “Muy conocido por la Comunidad de La Anunciación y todo el barrio de Ringuelet. Oremos por su eterno descanso”, había pedido el párroco a los creyentes.

La misa se concretó pero horas después se supo que todo había sido una confusión y que Fernandito había estado caminando por el centro. Una foto del grandote en la puerta de Mostaza sirvió para corroborarlo.

“Se armó un lío bárbaro, hasta la policía andaba averiguando por él. Resulta que nunca lo atropellaron y que Fernandito sigue vive y coleando”, concluyó Pablo.

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