El fiscal Marcelo Martini tiene mucho trabajo en estos días. Investiga a los policías imputados por los 36 sobres con $ 153.700 hallados en la Jefatura Departamental La Plata, espera las pericias complementarias por la muerte del ex jefe de la Comisaría n°16 de Villa Ponsati, Federico Jurado, en su celda de la Unidad Penal N°9 La Plata y exige al director general de Asuntos Internos, Guillermo Berra, investigar al jefe de la Policía Bonaerense, Pablo Bressi, en el marco de la “asociación ilícita”.

Sin embargo, el titular de la UFI N°3 La Plata pensó en renunciar ayer cuando la Sala V de Casación Penal ordenó excarcelar a los ocho ex comisarios. Y, ante BigBang, disparó: “La resolución de los jueces fue un mensaje de impunidad”.

El tribunal presidido por Jorge Hugo Celesia decidió resguardar la integridad física de los imputados luego de que el jueves 19 de enero apareciera muerto uno de ellos en su celda. El fiscal afirma que la autopsia avala la hipótesis de la “muerte natural”, pero el abogado de Jurado, Daniel Mazzocchini, denuncia que lo asfixiaron con la almohada.

Por eso, Mazzocchini, quien junto a Laura Corporaal también defiende a Raúl Frare, Sebastián Velázquez y Julio Sáenz, presentó el viernes el hábeas corpus para proteger sus vidas. La resolución del tribunal bonaerense se extendió ayer a los otros imputados: Darío Camerini, Walter Skramowskyj, Ariel Huck, Rodolfo Carballo y Sebastián Cuenca.

Para el fiscal era fundamental que continuaran detenidos con un objetivo central: “que se quiebren”.

“Si se hubieran arrepentido habrían recibido una pena en tentativa para salir en libertad”. Pero, siempre según Martini, la resolución de la Sala V de Casación sentó jurisprudencia: “Con esa lógica, la mitad de los internos deberían salir de la cárcel de Olmos”.

De hecho, el ministro de Justicia, Gustavo Ferrari, anunció hoy que, por decisión de la gobernadora María Eugenia Vidal, enviará un proyecto de ley a la Legislatura para reformar el sistema de apelaciones de la provincia. Es que actualmente existen hasta ocho instancias de Hábeas Corpus. El objetivo es limitarlo a dos.

Para el abogado, en cambio, la lentitud de la Justicia “le costó la vida a Jurado”. Es que insistió ante BigBang sobre la hipótesis del asesinato porque la autopsia también indica que se “visualiza a nivel subangulomandibular izquierdo tres improntas en piel de forma semicircular”. Por eso, sugirió: “Lo golpearon para dejarlo indefenso y lo asfixiaron con una almohada”. Mazzochini, al igual que el autor de “La Bonaerense”, Ricardo Ragendorfer, no tienen dudas: “A Vidal le tiraron un muerto en el escritorio”.

publicado en BigBang News