Todo en un marco en el que la suba de precios en el primer trimestre llegó al 13% y dejó al Gobierno muy lejos del objetivo que había anunciado: 29% para todo el año.

Alimentos y bebidas siguen encareciéndose a una velocidad que ni el más agorero de los economistas esperaban, y que influyen directamente en el nivel de pobreza. Analistas de distintas vertientes ya descuentan que sólo por la inercia de la escalada de precios en abril la inflación  superó el 4%, y calculan que no cerrará el año por debajo del 46%. En ese marco te contamos cuáles serán los próximos golpes al bolsillo, para cuidar la economía familiar y poner el ojo en los bienes y servicios que más cuesta afrontar mes a mes a cada familia.

El incremento en las empresas de telecomunicaciones

Pese a que todavía  no hayan sido autorizadas por el ENACOM (Ente Nacional de Comunicaciones), las firmas Claro y Movistar anunciaron que subirán un 8% en mayo y 7% en junio. Peor será la suba para los usuarios de Personal, que recibirán un aumento de 10% a partir de junio.

Prepagas

En abril hubo una suba de 4,5% , y días atrás anunciaron que se incrementarán nuevamente un 5,5%.  

Combustibles

En ese rubro tan sensible (por su incidencia en el costo de los otros bienes y servicios) llegará el tercer tramo de los aumentos escalonados en las naftas y el gasoil. Un dato que despierta mucho temor: ya hubo subas en marzo y abril. Pero además prevén que en mayo el aumento alcance a 15%, en total. Las subas en los combustibles sin ningún lugar a dudas repercutirán negativamente en el control (por ahora poco exitoso como lo demuestran los datos duros que publica el INDEC) de la inflación, con la consecuente caída del salario real y otras variables que repercuten en el humor (o malhumor) social.