En la Municipalidad de La Plata comenzaron a trabajar para crear el digesto jurídico local para contar con una base de datos que permita conocer cuáles son las ordenanzas vigentes.

Además, el fin de la iniciativa es poder establecer un orden de cara a la sanción de nuevas normativas o modificaciones sobre textos más antiguos que así lo requieran.

“La elaboración del digesto jurídico municipal es un paso importante en el camino hacia un Municipio más moderno, ordenado y transparente, en el que las reglas están claras y sean accesibles fácilmente a todos y a todas”, señaló el intendente local, Julio Alak, que se reunió esta semana con el asesor general del gobierno de la Provincia de Buenos Aires, Santiago Pérez Teruel.

Según se anunció, el jefe comunal firmará un convenio con Pérez Teruel que permitirá a los agentes municipales que se desempeñan en áreas jurídicas poder capacitarse a través de la Escuela de Abogacía de la Asesoría General de Gobierno.

Asimismo, la Provincia ofreció al mandatario local el servicio de consultas jurídicas de la Asesoría General para fortalecer la vinculación y el trabajo en materia legal de la Comuna.

Acompañaron a Alak en el encuentro el secretario de Legal y Técnica del Municipio, Guillermo Federico Comadira, la subsecretaria de Transparencia Institucional del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos bonaerense, Ana Laura Ramos, y la diputada provincial Lucía Iañez.

Historia del digesto

La palabra digesto deriva del latín digestum, derivado a su vez de digerere, que significa distribuir, ordenar. Es una compilación ordenada, según una codificación especial, de todas las normas emanadas de la administración de una institución.

Su origen se remonta al año 530 d.C., época en que el emperador bizantino Justiniano I ordenara la compilación y codificación de las obras jurídicas de los jurisconsultos romanos.

El primer Digesto, codificado por Triboniano entre el 530 y 533 d.C. se conoce con el nombre de Digesta sive Pandecta iuris y es considerado como la recopilación jurídica más importante del mundo.

Tiene el valor de haber permitido la conservación de la doctrina jurídica clásica, sirviendo de nexo con el derecho moderno, a través de las constantes citaciones y referencias, como precedente y justificante de doctrinas y opiniones en la legislación moderna.

El objetivo histórico de esta compilación estaba orientado, según la ambición de Justiniano, a la restauración del antiguo Imperio Romano, permitiendo rescatar su tradición jurídica y, al mismo tiempo, a la imposición de un conjunto de leyes uniforme sobre todo el vasto territorio de su imperio.