

Venezuela celebra este domingo nuevas elecciones presidenciales, en las que competirán el actual mandatario Nicolás Maduro y Edmundo González Urrutia, el candidato opositor, aunque vale destacar que la principal figura de este sector es María Corina Machado, a quien le había sido prohibido participar en la contienda.
Al respecto, el ex embajador argentino ante la Organización de Estados Americanos (OEA), Carlos Raimundi, destacó en diálogo con Info Blanco Sobre Negro que "transitando el cuarto día en Caracas, es una ciudad en calma y no se visualiza tensión".
"Al menos en los lugares donde he concurrido, porque el Consejo Nacional Electoral (CNE) nos ha distribuido en distintos espacios", detalló Raimundi.
"Estamos muy interesados en observar el clima para ver si es cierta o no esa sensación de crisis que intentan imponer desde la prensa hegemónica", resaltó el abogado, y agregó que "no hay un espacio público militarizado, creo que hay más policías en Buenos Aires que en Caracas".
Con relación al escenario político en la antesala de las elecciones, donde se discuten más de 20 años de hegemonía chavista, Raimundi sostuvo que hay "incertidumbre" en cuanto a los resultados.
"Cada una de las fuerzas se atribuye la victoria. La oposición trata de imponer que es un hecho la victoria por 25/30 puntos, algo muy difícil, pero no puedo aventurar nada, para después denunciar un fraude si el resultado no es ese", detalló el docente universitario, que de todas formas resaltó que está en el país "en nombre del Observatorio Parlamentario Electoral para la Integración Regional, junto con el Centro Carter y Naciones Unidas, así que tengo que dar pruebas de imparcialidad".
No obstante, Raimundi hizo una breve reflexión a título personal y comparó el escenario electoral en Venezuela "con la forma en la que funciona el lawfare, donde se genera el escarnio de una figura y se la acusa permanentemente, y cuando el juez tiene que dar una sentencia y no le dan pruebas está el tema de cómo queda frente a la sociedad", y agregó que "la oposición busca instalar que ganaron para luego salir a denunciar fraude".
"Robar la elección en Venezuela es imposible por la pulcritud de las elecciones, que ha sido probado y comprobado de mil maneras. He participado en diez auditorías previas de las distintas etapas del proceso y todas fueron aprobadas por la oposición, por lo tanto es imposible que se cometa fraude", destacó, de todas formas, el abogado de La Plata.
"La otra cosa que la oposición quiere es instalar una sensación de abatimiento en la sociedad por todas las penurias que ha pasado, sin mencionar la causa fundamental de eso, que es el bloqueo, la expropiación de CIDCO, la comercializadora que tiene Venezuela en Estados Unidos, la confiscación del oro. Todo eso ha generado un malestar y el discurso de la oposición es que 'esta gente' nos lleva a eso, y el de Maduro es que si ya hemos sido capaces de pasar lo peor y nos estamos recuperando tenemos un futuro venturoso porque vamos a hacer un gran llamado a la paz y al diálogo, y nos espera un gran futuro. Entre esos dos mensajes se dirime esta elección, dentro de la cual me resulta muy difícil hacer un vaticinio", concluyó Raimundi.