Opinión | 4 ene 2025
Elecciones 2025
Queremos romper con la casta política
Cuando los pueblos agotan su paciencia, hacen tronar el escarmiento (Perón).
Por: Alberto Buela Lamas y Diego Pablo Tárrago
Hace un año, luego de cuatro años del peor gobierno argentino de toda nuestra breve historia, el de los Fernández (Alberto y Cristina), el pueblo hizo tronar el escarmiento. Claro está que no eligió un estratega, sino a un hombre que aplicó la receta liberal de pe a pa. Nos sacó de la hiperinflación y nos devolvió el valor del peso, a costa de un costo social enorme.
Un año después, hace unos días no más, Cristina Fernández se apoderó de la presidencia del Partido Justicialista con el silencio cómplice o indiferente de los millones de peronistas que habitan nuestra tierra. Nosotros, jóvenes y no tanto, dirigentes peronistas, autoridades de agrupaciones, sindicatos, clubes, cámaras. mutuales, cooperativas, etc., en una palabra, miembros de las diversas organizaciones libres del pueblo, tenemos algo que decir y que proponer.
Hoy para hacer política en la Argentina, y en el resto de occidente, hay que tener un partido político como herramienta, de lo contrario la participación solo se transforma en testimonial; y esto muestra la contradicción subyacente de todo el sistema político que, para modificarlo, para terminar con la casta, hay que formar parte de ella (para terminar con el monopolio de los partidos políticos hay que crear nuevos partidos políticos). Esto le ha sucedido al Movimiento Obrero durante años y años. Sin ir más lejos, acaban de crear uno, entre tantos otros.
La tarea de los sindicalistas devenidos en diputados se diluyó en las directivas del Partido Justicialista, subsumiendo a los representantes de los trabajadores a los intereses de unos pocos.
Nuestra propuesta consiste en implantar una ley que permita al ciudadano de a pie, que incluso puede no pertenecer a ningún partido, participar activamente de la política.
Esta ley, que podría denominarse “ley de participación política comunitaria”, consiste en permitir al uomo qualunque votar, no solo por los candidatos de los partidos, sino también, por los candidatos de las organizaciones libres del pueblo. Así, en el momento de votar, se pueden presentar en el cuarto oscuro dos listas: una por los diferentes partidos y otra por las organizaciones.
Esto tiene un antecedente ilustre en la Constitución del Chaco de 1951, que fue conocida como la del doble voto. Pasaron los años y en 1984, el Land de Baviera adoptó el mismo tipo de sistema; luego los norteamericanos lo estudiaron y lo denominaron constitucionalismo de comunidad, que se aplica actualmente en algunos estados de EE. UU.
El liberalismo con Milei combate la casta desde el punto de vista económico, jurídico y policial, pues bien, nosotros queremos combatirla desde el punto de vista político adoptando un lema que podría ser; romper con la casta política desde la política.
(Alberto Buela Lamas es Presidente del Consejo Superior Peronista, y Diego Pablo Tárrago es secretario general de la Organización Política Participar).