El objetivo de la medida adoptada por el Gobierno nacional “no es generar mejor condiciones para la comercialización, sino para la compra de los consumidores”, dijo Blanco Muiño en declaraciones a radio La Red y difundidas por la agencia Télam.

Según el funcionario, de madrugada (entre las 6 y las 8 horas de cada jornada) “todas las cadenas informan precios para todos sus puntos de venta, y a partir de la información histórica y la nueva se van a hacer los controles para que la baja de la carga tributaria no vaya a rentabilidad”.

Blanco Muiño dijo que “no deberían faltar productos en góndola” porque los supermercados “no tienen limitación de disponibilidad de stocks y hay capacidad interna de producción”. Es decir, productos alcanzan y sobran, pero es muy probable que utilicen la rebaja de impuestos para robustecer sus márgenes de ganancias.

La promesa en tono de advertencia (de cara a las cadenas de comercialización) y en tono de campaña (de cara a la sociedad) suena a poco probable, luego de la ausencia absoluta de controles de precios, monitoreos, o cualquier otra medida de regulación a las empresas. Muchos especialistas ya advirtieron que (por el espiral inflacionario y al no haber precios de referencia) es muy posible que la reducción de impuestos sólo signifique rebajas para las empresas, pero que el beneficio sólo llegue parcialmente a las góndolas.

Y además, luego de que se paralizó toda política de seguimiento de precios cuidados, es inimaginable que haya agentes que verifiquen los valores que declaran las empresas.

Así, cualquier “control” suena al fallido “pacto de caballeros” que se anunció entre 19 firmas que participaban de Precios Esenciales (todas formadoras de precios) y el Gobierno.

Un pacto que nunca se cumplió y que sólo sirvió para calmar los reclamos de los consumidores.

Hay control cuando hay sanción , no cuando se lanzan veladas amenazas a poderosas firmas que lograron durante estos años tres años y medio aplastar a la Secretaría de Comercio Interior hasta convertirla en un organismo decorativo.