El maquinista y miembro de la ONG “Proyectar el Futuro”, Oscar Ríos, afirmó a Mañanas Platenses (Radio X5 FM 91.3): “La gente está acostumbrada a que el corta-tránsito paraban el tránsito para la llegada del tren, ahora no van a estar. El miedo de todos es que un día se produzca un accidente y un juez falle con que no puede pasar el tren”.

“Con la reducción de personal, dos compañeros del maquinista deberán bajarse antes de llegar a la parada, correr, cortar el tránsito, y luego volver a subir para continuar viaje”, agregó Ríos. El cambio hará que el servicio sea más lento.

Según pudo averiguar Blanco sobre Negro los únicos dos puestos fijos que continuarán teniendo sus banderilleros son en diagonal 80 y en Avenida 44.

“A través de la fundación se pensó el proyecto del ‘tren hospitalario’ que unía el Hospital Romero con el del Juan de Dios. Logramos que se realice la parte universitaria quedando pendiente lo demás. Desde el cambio de Gobierno, este servicio fue dejado muy de lado”, señaló el trabajador.

“De accidentarse un corta-tránsito el servicio ya no corre. Estamos peleando para que se expanda el servicio y ahora tenemos que preocuparnos para que no se elimine el servicio”, advirtió.

El año pasado, la Junta Vecinal por la Reactivación del Tren La Plata – Brandsen Luego denunció la falta de funcionamiento de la lectora de la tarjeta SUBE, lo que “lejos de significar una ventaja para los usuarios, podría convertirse en poco tiempo en una justificación para su levantamiento por su no rentabilidad”.

“Tengo 38 años de servicio de ferrocarril. Pasé por todas las etapas: la dictadura, la democracia, Ferrocarriles Argentinos, metropolitanos y hoy Trenes Argentinos, y sé que cuando a un servicio se le resta importancia es porque no lo tienen en cuenta y puede ser levantado en cualquier momento”, concluyó Ríos.