Se calcula que en la ciudad de La Plata viven alrededor de dos mil judíos, muchos de ellos conectados con instituciones, entre las que está el Beit Jabad.

Esta última es una entidad judaica de beneficencia, nacida en 2003, que forma parte del Movimiento Jabad Lubavitch Argentina y está dedicada a actividades culturales, sociales y de asistencia “que cuida las necesidades de la comunidad”. Cuenta con más de 30 instituciones en todo el país al servicio de la comunidad judía argentina, así como también tiene sedes en otras ciudades del mundo.

En el caso de La Plata, su director es el Rabino Tubia Serber, que nació en Buenos Aires en noviembre de 1974. Junto a él están su mujer Ilana Tova y sus diez hijos.

Previo a su establecimiento en La Plata, la familia Serber estudió y trabajó en Morristown, New Jersey, y Miami, Florida, como preparación para la tarea de difundir las enseñanzas de la santa Torá “a la luz de la filosofía jasídica de Jabad Lubavitch”.

En diálogo con Info Blanco Sobre Negro, Serber indicó que en el espacio ofrecen varios servicios para la colectividad, tales como rituales, rezos y ayuda social.

“En este momento hay una regularidad de 15 personas, a veces se llega a 80 o 100 en algún evento más grande”, agregó el Rabino, aunque resaltó que “la pandemia cambió todo”.

Vale destacar que las personas que asisten al mencionado espacio ubicado en la calle 16 N°732 son ortodoxos jasídicos, una rama del judáismo que se caracteriza por un cumplimiento estricto de la Torá.

El fundador del judaísmo jasídico fue Israel ben Eliezer, un rabino que enseñó que la adoración a Dios debe ser gozosa. El movimiento comenzó en la Europa oriental, específicamente en Bielorrusia y Ucrania, en el siglo XVIII.

Por último, Serber se refirió al uso de la palabra nazi para calificar a alguien que discrimina y resaltó que “la gente no entiende lo que significó el nazismo, que en realidad quería decir nacionalsocialismo”. “El nazismo iba contra todas las minorías. Yo no tildaría a nadie de nazi, sí de discriminador”.