“Los glovers son mensajeros independientes conectados a nuestra plataforma. Son personas que disponen de tiempo libre, vehículo y smartphone propio, y buscan sacarle el máximo rendimiento ayudándote a resolver tus gestiones del modo más rápido y eficaz. ¿Quieres ser glover? ¡Genial! Solo tienes que rellenar la solicitud de este enlace”, reza la página de Glovo, la app de mensajería que llegó recientemente a La Plata.

“Estaba sin laburo, mientras busco otra cosa más formal puedo tener un ingreso”, contó a Info BLANCO SOBRE NEGRO, Ignacio, un joven de Chacabuco y que estudia Ingeniería en La Plata y desde hace una semana comenzó a hacer repartos para Glovo en su bicicleta.

En Argentina, la app funciona en La Plata, Buenos Aires, Rosario y Córdoba. La idea es que cualquiera puede registrarse como “glover” para hacer envíos en su auto, moto o bicicleta. Los usuarios de esta app realizan compras, pedidos o envíos desde su celular y le asignan un mensajero con el que puede comunicarse. El valor del servicio es de 30 pesos.

“La ganancia varía, depende la cantidad de envíos que hagas. Yo trabajo cuatro horas por día más o menos y gano alrededor de 100 pesos la hora”, comentó Ignacio y agregó: “Lo bueno es que si no quiero salir porque llueve o tengo que estudiar no le tengo que pedir permiso a nadie”.

Glovo no es la única app de su tipo. La llegada de estas empresas motivó protestas de la Asociación Sindical de Motociclistas Mensajeros (Assim) que denunciaron un “modelo laboral precario que niega una relación con sus empleados”. Los glovers tienen que ser monotributistas y deben pagar por mes 200 pesos por mes para usar la aplicación.

Se trata de otra variante del modelo de negocios que popularizó Uber, donde se niega la existencia de relación laboral y el servicio es prestado por “colaboradores” en forma independiente. Los “Glovers” no tienen ninguna cobertura ante un accidente. La empresa planea crear un seguro pero quiere evitar que eso implique el reconocimiento de una relación laboral.