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“Estábamos acá relajando, sentí un crujido, pensé que era un auto y cuando me di vuelta ya lo tenía encima. Me golpeó una rama en la cara pero no me hizo nada”, contó una de las mujeres que participaba de una de clase de yoga en el Bosque que se vio interrumpida por la intempestiva caída de un árbol.

El ejemplar que se desplomó era un eucalipto muy añoso ubicado a pocos metros del Museo de Ciencias Naturales.

“Fue cayendo de a poco y pudimos corrernos a tiempo pero el árbol quedó a apenas 2 metros de nosotras”, contó otra de las mujeres que casi es aplastada por el eucalipto.

La caída del árbol provocó una gran polvareda y también volaron pedazos de ramas a varios metros.

Al lugar se acercaron otras personas que se encontraban en el Bosque. Algunos advirtieron que al lado del ejemplar caído se encuentra otro eucalipto en malas condiciones y con riesgo severo de caída.

“Los árboles tienen chapitas, están identificados pero parece que nadie controla su estado. Es realmente muy peligroso, podría haber ocurrido cualquier cosa”, advirtió Alejandro, un hombre que presenció la caída del eucalipto a muy pocos metros.