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Información General | 21 dic 2017

Muchos comercios bajaron sus persianas

Te contamos cómo operó la policía para instalar el falso rumor de saqueos en el centro de La Plata

Este miércoles un rumor que alertaba sobre una inminente ola de saqueos generó pánico entre los comerciantes del centro platense. Por precaución, muchos locales bajaron las persianas resignado horas valiosas de ventas, en la previa navideña. Info BLANCO SOBRE NEGRO te cuenta de dónde salió esa versión que nunca se concretó.


En la mañana de ayer efectivos policiales acudieron a algunos locales para comentar una información que daba cuenta de una ola de saqueos en La Plata, sabiendo que se esparciría rápidamente. El diciembre caliente, con fuertes protestas sociales, hizo que el rumor fuese más creíble.

En simultáneo, organizaciones sociales realizaban una movilización anunciada previamente a grandes empresas para pedir una donación de alimentos antes de las fiestas. Esta vez, el Movimiento Justicia y Libertad eligió marchar hasta el Bingo La Plata (diagonal 80 y 116) y luego a la sucursal de Carrefour de Avenida 7 entre 47 y 48.

En cercanías del Bingo, los integrantes de esta organización se toparon con efectivos policiales “maltratando” a dos jóvenes senegaleses dedicados a la venta ambulante y decidieron intervenir. “Los tenían esposados y los estaban basureando, nosotros nos metimos y como vieron que éramos tantos los policías decidieron largarlos, se subieron al patrullero y se fueron”, relataron a este portal.

Mascullando bronca los policías decidieron tomarse revancha y comenzaron a hacer circular un rumor de saqueos, advirtiendo que una gran cantidad de personas organizadas llegaban a la Ciudad para entrar a los comercios. Esta venganza habría sido pergeñada en la Comisaría Primera.

Por ejemplo, un policía fue al ACA de 9 y 51 y advirtió que había una “ola de saqueos en calle 8” y les recomendó que “cuiden los comercios”.

A medida que la organización social avanzaba por las calles céntricas de la ciudad, los comerciantes bajaban las persianas atemorizados. El rumor que habían escuchado tenía un primer indicio de verdad, a pesar de que era totalmente falso.

Las horas pasaron, los saqueos no ocurrieron y los comerciantes se perdieron muchas ventas, pero la policía tuvo su desquite.

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